Rosario Robles Berlanga llegó a ser la “hija predilecta” de San Antonio de las Alazanas, en el municipio de Arteaga, Coahuila, cuando fue integrante del patronato que organizó las celebraciones de los 150 años del pueblo en donde nacieron y crecieron sus ancestros; hoy que está en prisión pocos la recuerdan.

La exsecretaria de Desarrollo Social (Sedesol) en la administración del expresidente Enrique Peña Nieto, fue vinculada a proceso por el ejercicio indebido de la función pública y estará en prisión al menos el tiempo que dure el proceso, pues temen que huya.

Robles Berlanga nació en la Ciudad de México (antes Distrito Federal) el 17 de febrero de 1956 y estudió Economía en la Universidad Nacional Autónoma de México, pero sus raíces seguían en Coahuila, en el municipio de Arteaga.

Los viajes en su infancia y adolescencia a San Antonio de las Alazanas y a Saltillo eran constantes, nunca se desligó de las raíces de sus padres y sus abuelos.

En sus constantes visitas a Coahuila, cuando fue funcionaria en el sexenio pasado seguido se le decía paisana, por sus raíces coahuilenses, y ella también hablaba de su origen.

JEFA DE GOBIERNO

Como perredista Rosario Robles se convirtió no solo en presidenta de su partido, sino también Jefa de Gobierno del Distrito Federal, un cargo que en su momento fue el máximo poder.

Con Enrique Peña Nieto dirigió tanto la Secretaría de Desarrollo Social y la Cruzada contra el Hambre acompañada por otro coahuilense: Javier Guerrero García, y también pasó por la Sedatu.

Hay quienes la recuerdan en sus inicios como perredista en Saltillo, y en Coahuila, abanderando causas en el PRD, en los tiempos en que Enrique Martínez empezaba su gubernatura.

Hace 12 años, Rosario Robles aún como perredista, podía convivir fácilmente con priístas: en 2007 cuando San Antonio de las Alazanas cumplió 150 años de su fundación, el ex gobernador Humberto Moreira le entregó un sarape bordado con el nombre de Rosario, en reconocimiento por su participación en la organización de los festejos como integrante del patronato.

Rosario dijo en ese momento que lo hacía en reconocimiento a su abuelo, quien originario de San Antonio, en la Sierra de Arteaga, había participado en el patronato en los festejos del 100 aniversario de este pueblo.

En ideología política en ese momento concordaba con Humberto Moreira, pues en años en que la administración federal estaba en manos de Felipe Calderón, Rosario Robles pedía que Calderón investigara a Vicente Fox.

SU DEBUT EN COAHUILA

Robles Berlanga “debutó” políticamente en Coahuila, durante las elecciones de 1999, cuando se eligió a Enrique Martínez y Martínez como gobernador del estado

En aquella ocasión, la saltillense Juanita Lara fue candidata a diputada local por el Partido de la Revolución Democrática y ofreció una comida para la prensa en el restaurant “El Tapanco”, donde presentó a Robles como una dirigente “de sangre coahuilense”, responsable de apoyar las campañas del partido del sol azteca en la entidad.

Rosario Robles mencionó que unos primos suyos se dedicaban a la construcción y siendo Secretaria de Estado en el sexenio de Enrique Peña Nieto, llevó a trabajar con ella al sampetrino Javier Guerrero García.

Esa es básicamente la relación de Robles con la tierra de sus antepasados. Ahora enfrenta el mayor escándalo de su vida política, y está en riesgo nada menos que su libertad.

Esta mañana, Rosario Robles fue vinculada a proceso por ejercicio indebido del servicio público; permanecerá recluida en en el penal de Santa Martha.