El Ayuntamiento de Torreón que por tres años encabezó Miguel Riquelme adeuda 610 millones 925 mil 261 pesos, entre proveedores y bancos, como consta en su cuenta pública de 2016, aprobada el 31 de enero.

Se trata, cabe señalar, del mayor pasivo entre los 38 municipios de Coahuila (Saltillo, por ejemplo, en este momento debe sólo 291 millones 599 mil 172 pesos a comparación).

Lo anterior, claro está, confiando en la veracidad de los datos públicos, es decir, sin considerar que pueda existir una doble contabilidad oculta. Y la hipótesis no es descabellada si tomamos en cuenta que, en el pasado reciente, no fueron reportados 20 mil 529 millones de pesos en deuda por el Gobierno de Coahuila en su cuenta pública de 2010.

¿Quién le asegura que dichas prácticas no se repetirán en lo sucesivo cuando permanecen en funciones los mismos servidores involucrados –directa e indirectamente– en aquel caso?, ¿por qué deberíamos descartar esa posibilidad y confiar a ciegas?

Ahora bien, si revisa usted los presupuestos anuales, constatará que durante 2017 recibirá Torreón 648 millones 370 mil 878 pesos menos a comparación del ejercicio fiscal 2016.

La reducción equivale al 29.7%. Casi una tercera parte.

A decir de la síndica de vigilancia, Gabriela Casale, el tesorero municipal, Enrique Mota, recortó el presupuesto a fin de utilizar lo rasurado para pagar la deuda existente (El Siglo de Torreón, 24 diciembre 2016). Pero hay un pequeño detalle: el “tijeretazo” no aparece en libros, ni consta que los recursos “faltantes” (por decirlo de alguna manera) existan, mucho menos que se vayan a utilizar con dicha finalidad.

Por el contrario, entre intereses y amortización de la deuda pública, para 2017 sólo hay etiquetados 30 millones de pesos.

Si cuando las cantidades figuran sobre papel, y están sujetas al escrutinio del Congreso y la Auditoría Superior del Estado, desaparecen, qué esperar en un caso como éste donde sólo existe una suposición y, a lo sumo, una promesa.

Para dimensionar: los mil 534 millones 645 mil 564 pesos que tiene presupuestados Torreón para 2017 son similares al presupuesto que recibió en 2012, de mil 512 millones 197 mil 026 pesos.

Y aquí viene la pregunta fundamental: ¿por qué gastará lo mismo que hace un lustro, si las necesidades, la población y particularmente los costos de prácticamente todo, han aumentado?

Apenas el 30 de septiembre de 2016 el Cabildo de Torreón aprobó un anteproyecto de Ley de Ingresos para 2017 por 2 mil 400 millones de pesos, superior incluso a los 2 mil 183 millones 016 mil 442 pesos recibidos en 2016.

Pero en el siguiente trimestre –que coincide con el inicio del proceso electoral– se desplomó la cifra y se terminó votando el viernes 23 de diciembre, como suelen tratarse los asuntos peliagudos en Coahuila: de espaldas a la ciudadanía, dos días antes de Navidad, cuando todo mundo está pensando en otra cosa.

¿No le resulta por lo menos curioso?

Si bien hubo recortes en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2017 que indirectamente afectan a los municipios del País, éstos no son tan significativos para Torreón pues le disminuyeron 143 millones 930 mil 023 pesos por concepto de participaciones y aportaciones federales.

El inconveniente radica en la escasa contribución que tendrá el año en curso. La diferencia sustancial está en los 217 millones 157 mil 684 pesos que no recaudará por concepto de “derechos”, lo cual anticipa un ejercicio anual de parálisis, donde la atención estará en lo electoral y no en las finanzas municipales. ¿Para qué sirve, entonces, un Municipio que no las fomenta?

Ahí no acaba el problema. De no liquidarse, el pasivo actual de 610 millones 925 mil 261 pesos atará de manos al próximo Gobierno anual que iniciará funciones el 1 de enero de 2018.

Cortita y al pie
Por lo demás, no se puede soslayar la confrontación con Saltillo. A diferencia de Torreón, la capital aumentó 9.3% su presupuesto para 2017. De 2 mil 064 millones 587 mil pesos, en 2016, a 2 mil 277 millones 951 mil 601 pesos, lo cual significa 213 millones 364 mil 601 pesos más.

La última y nos vamos
Resumiendo: en Torreón hay una deuda de 610 millones de pesos, un “faltante” de 648 millones en el presupuesto para 2017, y un Alcalde con licencia en precampaña para ser candidato a Gobernador. Cruce las variables de la ecuación y encontrará la respuesta.

@luiscarlosplata