Un grupo de ciudadanos tomó la Alcaldía de Ocampo en protesta por el despido de 11 trabajadores del Municipio, incluidos cuatro policías.

Desde las 07:00 horas cerraron las oficinas porque la alcaldesa, Arcedalia Ramírez, decidió destituir a subdirectores, cuatro elementos de Seguridad y un velador de la Comandancia. Por ello, de igual forma, pidieron el cese del Tesorero.

“Buscamos que les den su plaza. El pueblo tomó la Presidencia. Nos decían que estaba muy alterada la nómina, que había muchos trabajadores ‘fantasma’, pero parece que los querían desocupar para meter a otra gente”, expuso una mujer presente, que solicitó el anonimato.

El bloqueo terminó hasta las 16:00 horas, presuntamente con la promesa de que se reinstalarían al menos a los empleados que no eran policías.

Fuerza Coahuila, ¿sí o no?  
       
A la par de la protesta, personas externaron a VANGUARDIA su deseo de que vuelva Fuerza Coahuila al municipio, al asegurar que varios delitos han incrementado.

María Vázquez, una de las inconformes, mencionó que “como ciudadanos exigimos que regrese Fuerza Coahuila. Hay muchos secuestros, robos y la Policía no hace nada porque a veces son los mismos”.

Vázquez afirmó que Ocampo vive un clima de inseguridad, que se agudizó desde que la presidenta retiró a los elementos de la corporación estatal días después de asumir el cargo –bajo el argumento de que existían quejas y denuncias de los pobladores contra ésta –.

Por ello, según contó, varios ciudadanos han pedido a Ramírez la vuelta de Fuerza Coahuila. Incluso, relató que la propia Alcaldesa habló con ella y le aseguró que había ido a Saltillo para firmar su regreso. 

No obstante, otro grupo de ciudadanos, entre ellos algunos que tomaron la Presidencia, rechazaron a Fuerza Coahuila y acusaron a la edil de buscar traerla de nuevo.