Ya sea por su dilatada carrera como actor, porque su nombre suena como uno de los candidatos a ser James Bond o porque su nombre ha sonado más que nunca por su fugaz relación con Taylor Swift, Tom Hiddleston es el rostro escogido por Gucci para su nueva campaña.

El actor británico, de 35 años, pone cara a la colección de trajes de la firma italiana. El encargado de dirigir la campaña ha sido Glen Luchford, colaborador habitual de Alessandro Michele, el director creativo de la marca que ha revitalizado Gucci desde que se puso frente a la firma en enero de 2015. Una sesión de fotos que se llevó a cabo en la mansión de Beverly Hills (Los Ángeles) que era propiedad del fallecido artista y reconocido escenógrafo de la época dorada de Hollywood Tony Duquette. Ni los recargados decorados con cuadros y antigüedades, los perros de raza Lebrel Afgano ni los llamativos mocasines de Gucci forrados de pelo consiguen robarle el protagonismo a Tom Hiddleston.

Una ostentación y un protagonista para la colección crucero de trajes de 2017 de la firma que contrasta con la recientemente desvelada de su colección crucero del año que viene. En esa última, la veterana actriz británica Vanessa Redgrave, de 79 años, era la protagonista indiscutible de una colección que se mostraba con la campiña inglesa como telón de fondo. Una cosa parecen tener en común: la pasión de Alessandro Michele por la cultura de Reino Unido y la reconocida elegancia británica.