Tom Daley, el clavadista británico, ganador de la medalla de oro en salto por parejas, no deja pasar la ocasión para continuar con sus tejidos y así liberarse del estrés que le genera la competencia. 

El medallista olímpico fue a ver a sus sus compañeras a la final de trampolín femenino y tejía mientras tanto. Y como no podría ser de otra forma, la imagen no tardó en viralizarse en Twitter.

Ante esta situación, el atleta se manifestó al respecto a través de sus redes sociales: “Aprender a tejer y hacer crochet me ha ayudado mucho en estos Juegos Olímpicos ¡También hice una pequeña caja de medallas!”, publicó acompañado de un video en el que muestra el medallero tejido que fabricó.

Incluso dio a conocer, para todos aquellos que se preguntaban qué estaba tejiendo en ese momento, que hacía un suetercito para una famosa perrita llamada, Izzy The Fenchie.

Y desde luego, la emoción de la pequeña mascota al saberse destinataria de la prenda, no tardó en llegar. “¡Muy emocionada! ¿Han visto al medallista olímpico Tom Daley tejiendo mi suéter en las Olimpiadas de Tokio?", comentó junto a un reel.

Desde que se convirtió en tendencia, Daley ha recibido buenos positivos respecto a cómo su hobbie incide en la lucha contra la masculinidad tóxica y los estereotipos de género.

Por si fuera poco todas sus obras son subastadas a través de su cuenta de Instagram “Made With Love by Tom Daley” y las ganancias son donadas a obras de beneficencia donde recauda fondos para el estudio y lucha contra los tumores cerebrales, luego de que su padre muriera por causa de uno.

En qué te beneficia tejer…

Si te has preguntado qué te puede aportar esta actividad, aquí te van algunos datos para que te animes a iniciarte en el mundo del tejido. Primero, debes saber que a la acción de tejer con fines terapéuticos, se le conoce como lanaterapia. 

Explica el sitio, la mente es maravillosa, que “Al tejer, tus ojos deben ver cómo pasan las agujas a través de la lana para ir reproduciendo un patrón que elegiste previamente y tus manos deben sujetar tanto las agujas como la lana, así como moverse de determinadas maneras a un ritmo determinado. Todo esto podría parecer un proceso simple, pero está lejos de serlo. En realidad, constituye un ejercicio para la mente, tan completo como jugar ajedrez, tocar un instrumento o escribir”.

Y añade: “Tejer permite ejercitar las manos, pero también estimula la capacidad de aprendizaje y memoria, fomenta la concentración y la creatividad. Además, promueve emociones positivas y reconfortantes”.