La Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos condenó de manera unánime el crimen del presidente de la Comisión de Derechos Humanos de Baja California Sur, Silvestre de la Toba Camacho, perpetrado el 20 de noviembre en La Paz, Baja California Sur.
 
Los ombudsperson del país rindieron un homenaje póstumo a su homólogo bajacaliforniano, luego de los hechos en los que también resultó muerto su hijo Fernando de la Toba Lucero, y gravemente heridas su esposa e hija.
 
En un hotel ubicado en Paseo de la Reforma, pidieron a las autoridades garantizar que ningún defensor o defensora de los derechos humanos, ni sus colaboradores o familiares sean agredidos por su labor de defensa.

“El mejor homenaje que podemos hacer a Silvestre de la Toba es exigir que autoridades brinden garantías para que la ciudadanía no se vea afectada a partir de las agresiones a los defensores de derechos humanos”, indicó el presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), Luis Raúl González Pérez.
 
El ombudsman nacional opinó que de manera coordinada con cada ombudsperson, se debe discutir las condiciones que deben tener los defensores del pueblo para el ejercicio de sus tareas.

Lamentó que en los 27 años de existencia de la CNDH y en los 25, en promedio, de las comisiones estatales, “enfrentemos el artero crimen en contra de un defensor público”.
 
Aclaró que la naturaleza del ombudsman no es otra más que en cumplimiento de la ley y respeto de la dignidad de las personas.
 
Anunció que la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos elaborará un informe sobre el tema de la defensa de los derechos humanos de los defensores; “un informe en el que la Federación al unísono aborde este tema”.
 
La federación agrupa a 33 comisiones, procuradurías y defensorías de derechos humanos de todo el país.