Por: José Reyes 
Fotos: Omar Saucedo

Amediados de 2011, el entonces alcalde de Saltillo, Jericó Abramo Masso empezó a hablar de la necesidad de construir una red para trasladar el agua tratada por la Planta Tratadora de Aguas Residuales, a empresas de Ramos Arizpe, en vez de tirarla a los arroyos de la ciudad.

La idea era redonda, pues el líquido sería vendido a los empresarios de Ramos Arizpe, el Municipio amortiguaría el costo anual de operaciones de la planta tratadora, que en ese entonces era de 82 millones de pesos y, sobre todo, sería un alivio para los mantos acuíferos de la región y para el medio ambiente.

El proyecto de Abramo Masso, que se bautizó como “Línea Morada”, consiste  en la construcción de una la línea de entre 14 y 18 kilómetros,  desde la planta tratadora “Ideal” ubicada en Ramos Arizpe, hasta la planta de Cementos Apasco.

Está contemplada como una línea de presión con agua tratada para dar servicio al corredor industrial Saltillo-Ramos Arizpe, para de esta manera, dar prioridad para que el agua del subsuelo sea para consumo humano y la de la planta sería de reuso para las empresas. 

De acuerdo con Juan  Carlos Ayup, entonces director de la CEAS, este sistema costaría más 100 millones de pesos, y abarca una extensión de 18 kilómetros desde la PTAR y concluirá en las inmediaciones de la Planta Apasco y tendría la capacidad de abastecer de 300 litros por segundo a la industria.

“Estamos platicando con diferentes empresas localizadas en parques industriales para venderles el agua tratada reutilizable y actualmente estamos obteniendo un censo de los que requieren el agua y una vez que estemos en condiciones de terminar con el proyecto, venderla”, decía Ayup a mediados de 2016

Desde esas fechas, Ayup afirmó que ya se pasó a la tercera etapa de construcción y concluirá con una más que está prevista para el próximo año.

A casi 6 años de concebida esta idea, el proyecto, si bien no está en el olvido, permanece “congelado” porque simplemente no hay recursos para continuarlo, y sólo se alcanzaron a construir alrededor de 7 kilómetros del mismo, en el que se habrían invertido 27 millones de pesos equivalentes a la primera etapa.

NO LE DESTINAN NI UN PESO

Por lo menos, la Línea Morada permanecerá como proyecto, pues en el Presupuesto de Egresos 2017 del Gobierno del Estado, en el rubro de Desarrollo Social y Protección al Ambiente, no hay dinero destinado.

Ni en el renglón de Administración del Agua ni en el de Ordenación de Aguas Residuales, Drenaje y Alcantarillado hay dinero contemplado, según el documento publicado en el Periódico Oficial de Estado.

Desde su nacimiento, el proyecto enfrentó problemas, sobre todo financieros,  para su consecución, pues en esos años el entonces alcalde Jericó Abramo Masso nunca consiguió el crédito del Congreso del Estado para el objetivo.

Sin embargo, fue hasta enero de 2014, cuando la obra empezó a construirse, por el área de Los Pinos, en Ramos Arizpe.

Seis años de promesas: Intentos fallidos 

A mediados del 2011, el entonces alcalde Jericó Abramo Masso empezó a hablar de la necesidad de construir una red para trasladar el agua tratada por la Planta Tratadora de Aguas Residuales de la capital coahuilense a empresas de Ramos Arizpe, en vez de tirarla a los arroyos de la ciudad.

Sin embargo, desde un inicio, la legislatura encabezada por Eliseo Mendoza Berrueto, negó la solicitud de un crédito por 170 millones de pesos con el que se pretendía iniciar la obra.

Además, en  noviembre de 2012, el municipio prácticamente “renunció” a seguir intentando hacer la obra y se “distrajo”  cuando Abramo Masso, y representantes de la minera Peñasquito Goldcorp, de Zacatecas,  firmaron una carta de intención para el suministro de agua tratada que produce la Planta Tratadora de Aguas Residuales (PTAR) de Saltillo.

La empresa Peñasquito se ubica en Mazapil, Zacatecas, a 160 kilómetros de Saltillo y es una de las más grandes productoras de oro, plata y zinc en México y Latinoamérica.

En el  encuentro, la empresa minera se  mostró dispuesta a construir una línea para trasladar el agua hasta Mazapil, e invertir en el equipo de bombeo necesario, sin embargo, la intención  nunca cristalizó.

Se informó que Peñasquito utiliza diariamente para su producción 85 mil metros cúbicos de agua y esperaba comprar a la PTAR de Saltillo alrededor de 43 mil litros.

También a finales de 2012, el Estado, a través de Ricardo Aguirre, entonces director de la CEAS, tomó el plan al señalar que “dentro del proyecto para mantener en equilibrio los mantos acuíferos, el Gobernador Rubén Moreira impulsa la construcción de la línea morada entre Saltillo y Ramos Arizpe, para que la industria de estas dos localidades aprovechen el agua reciclada de la planta tratadora de esta ciudad”.

“Esta obra permitirá a las industrias un importante ahorro, porque la Comisión Nacional del Agua les cobra el metro cúbico entre 13 y 14 pesos, mientras que al usar la reciclada de la planta tratadora lo pagaría en 8 y 9 pesos”.

Explicó entonces que el proyecto contempla la construcción de una la línea (Morada) de una extensión de 14 kilómetros desde la planta tratadora “Ideal” de Saltillo, hasta la planta de Cementos Apasco.

Precisó Aguirre que para que esta obra sea una realidad, en poco tiempo el Gobernador del Estado firmará un convenio de coordinación con el Ayuntamiento Saltillo para el aprovechamiento del agua tratada.

SERÍA OPERADA POR LA CEAS

En el referido convenio, de acordó que la Línea Morada sería operada por la Comisión Estatal de Aguas y Saneamiento (CEAS) y alrededor del 50 por ciento de los recursos que se obtengan de la venta del líquido, dependiendo de la cantidad de agua comercializada, será para beneficio del Ayuntamiento de Saltillo, mientras que el resto para el Estado. 

Se anunció que el Estado tenía ya el módulo para el tratamiento terciario del agua, lo que permitirá en una primera etapa una producción de 200 litros por segundo y en el mediano plazo, cuando se construya un segundo módulo, hasta 400 litros por segundo de agua tratada para la industria. 

En febrero de 2015, fue cuando se realizó el último recorrido de supervisión de la Línea Morada, por parte de la ya desaparecida Secretaría de Gestión Urbana, Agua y Ordenamiento Territorial (Segu).

Generalidades de la Línea Morada

> El objetivo de la Línea Morada es que las aguas negras que genera Saltillo sean reutilizadas. 

> También se busca que una vez tratadas, puedan comercializarse para diversas actividades, principalmente para el sector industrial.

> La planta tratadora actualmente produce 950 litros por segundo. 

> Solamente comercializa el 0.6 por ciento a la industria.  El resto del agua tratada es tirada al arroyo La Encantada. 

> No hay fecha para la conclusión de la llamada Línea Morada. 

> Con la Línea Morada se pudiera llevar y comercializar el agua tratada a la zona industrial de Ramos Arizpe y  se elevaría del uno al 15 por ciento el agua tratada que se vende.