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Thiago se vuelve indispensable para el Bayern
En el Bayern Múnich comienzan a entender cada vez más las razones que llevaron al técnico Josep Guardiola a exigir perentoriamente el fichaje del español Thiago Alcántara con la ya legendaria frase de "¡Thiago o nada!".
El armador de juego de 25 años se ha convertido en una figura indispensable para el equipo que dirige ahora Carlo Ancelotti. Thiago brilló en la goleada de 5-1 sobre el Arsenal en la ida de octavos de final de la Liga de Campeones con un doblete, una asistencia y una impecable gestión de la ofensiva muniquesa.
"Su rendimiento fue verdaderamente bueno. Fue perfecto", lo elogió Ancelotti, quien considera al español "uno de los mejores centrocampistas del mundo".
El sucesor de Guardiola encontró el papel perfecto para Thiago al cambiar el sistema a un 4-2-3-1. El centrocampista fue el nexo irremplazable entre la ofensiva y la defensiva, "el hombre entre las líneas", como lo describió Ancelotti.
"Lo necesitamos por su creatividad, sus pases", lo secundó el holandés Arjen Robben.
Thiago Alcántara do Nascimento, hijo de una voleibolista española y del ex jugador brasileño de fútbol Mazinho, descolló en el conjunto al igual que los astros ofensivos Robert Lewandowski y Robben. "Fue el factor decisivo", lo elogió Mats Hummels.
Thiago llegó a Múnich en el verano (boreal) de 2013 por unos 25 millones de euros (26,6 millones de dólares) procedente del Barcelona. El pupilo preferido de Guardiola tuvo que luchar con varias lesiones y curiosamente comenzó a mostrar su calidad tras la partida del técnico catalán al Manchester City.
"Naturalmente que estoy muy feliz", dijo el centrocampista. El hermano de Rafinha, aún en el Barcelona, anotó contra el Arsenal su cuarto y quinto gol en la Champions. "En el segundo tiempo jugamos de una forma impresionante".
Thiago desplazó en el sistema de juego al internacional germano Thomas Müller, que empezó en el banco el partido ante 70,000 espectadores en el Allianz Arena.
Sin embargo, Müller tuvo motivos de alegría porque poco después de ingresar en el campo se reencontró con el gol que le había sido esquivo esta temporada, asistido justamente por Thiago. Müller abrazó con fuerza al español para agradecerle el gesto. Thiago lo habilitó desde una posición en la que podría haber marcado él mismo.