Eduardo “Teddy” Bustillos tiene frente a él una de las batallas más complicadas, decidir si se mantiene en los octágonos de las MMA o dejar de ser peleador profesional.

“Teddy”, quien ha forjado una buena carrera dentro de las Artes Marciales Mixtas en ligas de Estados Unidos y México, tenía planes de volver a pelear en casa dentro de la FMP 46, sin embargo, recibió “un golpe” que lo puso a pensar en su futuro.

Como parte de su preparación, al igual que en cada una de sus peleas, el corte de peso fue exigente, pero la reacción de su sistema fue diferente. La deshidratación y un dolor abdominal que se prolongó hasta el domingo, un día después de la fecha en que se había pactado el combate, le impidieron subir a la jaula.

“Analizamos mi estado físico, mi situación, el dolor, el desgaste; me realizaron unos estudios y salí con unos niveles elevados. El doctor nos recomendó que no continuaramos con el corte (de peso) y mucho menos con la pelea.

“Mi prioridad por muchos años era pelear, competir y entrenar. Pero en el corazón no se manda y mis prioridades cambiaron”, señaló Bustillos, quien ha tomado la decisión de formar una familia.

Junto a su equipo, “Teddy” analizó la situación y tomó en cuenta todas las veces que en el pasado subió e pelear sin estar al 100 por ciento.

“He peleado fracturado, desgarrado, con contracturas abdominales y demas. Tomando en cuenta los compromisos próximos que tengo en mi vida personal, el riesgo latente de pelear en un estado no óptimo, y el haber llegado hasta la hospitalización, fueron las razones suficientes”, sentenció.