La futbolista china Sun Wen tendrá el honor de acceder al Salón de la Fama de Futbol en la Generación 2016 y será la tercera mujer en obtener esta distinción, tras las estadunidenses Mia Hamm y Michelle Akers.

Sun Wen es probablemente una de las mayores exponentes no sólo del futbol de mujeres en China, sino de todo el mundo y prueba de ello es que fue nombrada junto con Akers como la Jugadora del Siglo de la Federación Internacional de Futbol Asociación (FIFA).

Nació el 6 de abril de 1973 en Shangai y a los 17 años de edad ya representaba a su país en la selección absoluta, pero bajo el mandato del entrenador Shang Ruihua fue que consiguió la titularidad habitual en el equipo.

Wen mostró su talento en la primer Copa Mundial Femenina de la FIFA celebrada en su país en 1991 al ser nombrada dentro del once ideal del certamen, además de acceder a cuartos de final del torneo y marcó un gol.

En Suecia 1995, la jugadora del siglo guió a sus compañeras a semifinales de la siguiente justa mundialista y aunque cayeron en contra de Alemania 1-0, logró deslumbrar al mundo con su talento.

Sus capacidades quedaron al descubierto en los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996, pues llegaron a la final, pero perdieron con Estados Unidos 2-1 y se adjudicaron la medalla de plata.

Lo anterior fue apenas el preludio de la calidad que tenía en los pies la atacante, pues en 1999 vivió la cúspide de su carrera de vuelta en territorio estadunidense.

En esta ocasión lideró nuevamente a China a pelear por una final, pero esta vez en el mundial de la categoría de Estados Unidos y aunque volvieron a perder contra las de Estados Unidos, ella fue la máxima goleadora del evento con siete dianas y fue premiada con el Balón de Oro y Bota de Oro.

El destino le permitió a Sun Wen despedirse de su amado deporte en la misma tierra que la vio brillar y tras disputar el mundial de 2003 otra vez en “la tierra de la libertad”, anunció su retiro de las canchas, dejando tras de sí una carrera espectacular.

La “Maradona” del futbol femenil dejó una carrera con un palmarés individual impresionante, que ha hecho que escriba su nombre con letras doradas en la cúspide del balompié no solamente femenil, sino de toda la historia.