CDMX.- El Gobierno de Andrés Manuel López Obrador espera que la economía del país crezca en 2020 en un rango de 1.5-2.5 por ciento el próximo año, un pronóstico mejor al previo, que era de 1. -2.4 por ciento.

“Se estima que el fortalecimiento del mercado interno, la creación de empleos, el repunte del crédito y la inversión en infraestructura pública y privada generen un mayor dinamismo durante el año”, dijo la Secretaría de Hacienda en un comunicado, en el marco de la entrega del Paquete Económico para 2020.

En el Paquete Económico 2020 que  la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) entregó ayer al Congreso de la Unión contiene un marco macroeconómico realista y conservador, en línea con las expectativas de analistas privados y con  énfasis en mantener la disciplina fiscal.

En los Criterios Generales de Política Económica (CGPE) se plantea tener una inflación de 3.2% y un tipo de cambio promedio de 20 pesos por dólar.

Para la mezcla mexicana de petróleo se prevé un precio de 53 dólares por barril. En tanto, analistas confían en que el gobierno federal haya adquirido coberturas petroleras en los mercados internacionales para asegurar un precio de por lo menos 50 dólares. 

Se espera que se mantenga el superávit primario por debajo de 1% del Producto Interno Bruto (PIB), con un déficit fiscal de 1.6%.

En materia de gasto, se prevé que seguirá la política de austeridad, por lo cual no habrá aumento de salarios para mandos medios y superiores en la administración pública federal ni la contratación de personal por honorarios.

Se estaría planteando eliminar  direcciones generales adjuntas de la estructura de las secretarías de Estado y entidades de la administración pública federal. Con ello se contendrá el gasto casi 5%.

PAGAN POR VER

La mayoría de los analistas han  mostrado una postura sobre la expectativa del Paquete Económico 2020 de “pagar por ver”.

El director de Estudios Económicos de CitiBanamex, Sergio Luna, estimó que en los CGPE se propondrá una meta fiscal en línea con lo planteado de mantener el superávit primario fiscal de entre 0.5% y 1% del PIB. Si fuera menor y se utilizara para gasto corriente, generaría inquietud, advirtió.

A su vez, analistas de Scotiabank México enfatizaron que el margen de maniobra de la política fiscal continúa reduciéndose en un entorno en el que la responsabilidad presupuestaria y el cumplimiento de metas fiscales son prioridad. Por ello, confían en que el gobierno reafirme este compromiso en la presentación del paquete.

Con información de El Financiero y El Universal