Pregunta:
He observado que cuando hago algo desagradable o egoísta, tiendo a explicar ese comportamiento como si fuera culpa de otro, lo cual me libera de toda responsabilidad. No tomo la decisión de hacerlo, simplemente me doy cuenta cuando ya estoy haciéndolo. De modo que es algo inconsciente, pero no todo el tiempo. También puedo quedar atrapada en un enojo con una amiga y empezar a pensar qué le sucede a nuestra amistad y cuanto más lo pienso peor me siento. Ella dice que no veo las cosas como son y que no están tan mal. A veces, me siento melodramática. ¿Cómo puedo dejar de hacer esto?

Respuesta:
¿Alguna vez oyó la advertencia “El hecho de que lo hayas leído online, no significa que sea verdad”? Lo mismo vale para el contenido de sus pensamientos. El hecho de que lo piense -y que se sienta mal al respecto, que le genere depresión o enojo- no significa tampoco que sea cierto.
Su increíble imaginación está creando constantemente historias acerca de lo que ve, lo que oye o lo que experimenta. Usted es un ser tan creativo que le resulta casi imposible ver cualquier experiencia como lo que es realmente, como hechos, simplemente, sin que su imaginación le agregue cosas.

En este momento, sus esquemas de pensamiento son literalmente la suma de todas sus experiencias anteriores, y dichas experiencias han creado una lente que filtra todo lo que ve, oye y percibe. Una persona puede tener una lente muy negativa, nublada por el miedo. Es posible que vea todo y a todos como una amenaza (aunque el pensamiento no sea acertado). Su lente puede llevarla a crear historias que le demuestran constantemente que no vale lo suficiente. Puede ver el mundo a través de una lente de crítica y culpa, lo cual significa crear historias en las que nada es nunca culpa de ella, o su lente podría ser proclive a la autocompasión, el enojo o el conflicto.

Una lente nublada por el miedo distorsiona la verdad y lleva a la imaginación a crear historias que se ajustan a sus ideas sesgadas sobre el mundo. Entonces, la persona confabula la realidad para que se ajuste a su historia y así poder estar acertada con respecto a su perspectiva negativa. Su confabulación le ayuda a creer en su historia y pensar que es exacta.

En psicología, confabular significa producir una visión fabricada, distorsionada o mal interpretada de la realidad, y todos lo hacemos, hasta cierto punto, todos los días. Por lo tanto, es muy importante que usted no crea todo lo que piensa porque una gran parte de su pensamiento no es cierto y está creando una infelicidad auto-infligida en su vida.

Es duro despertar y salir de estas historias porque sus emociones se involucran (muy rápido) y le hacen sentir emociones fuertes con respecto a ellas. Entonces, usted considera que la historia seguramente es real o no se sentiría de esa manera ¿no?

Nuestro cerebro crea emociones muy reales alrededor de la perspectiva que terminamos adoptando, y estas emociones nos hace quedar atrapados de cabo a rabo en la historia, pero eso de todos modos no hace que la historia sea cierta. Las emociones no son una prueba.

No se puede confiar ni en los sentimientos ni en los pensamientos.

Tiene razón respecto de cómo se siente. Usted se siente realmente como dice sentirse y nadie puede discutírselo. Pero es posible que esté totalmente desacertada en la perspectiva o la historia que inventó, que creó esos sentimientos, lo cual significa que las emociones no están justificadas. (¡Lea esto nuevamente!)

Es hora de que crezca y se haga más responsable personalmente de sus pensamientos y sus emociones. Es hora de que aprenda a estar en el presente y elegir conscientemente su perspectiva en vez de dejar que la elija su programa inconsciente.

Usted merece aprender esto dado que esa gran cantidad de sufrimiento (que está experimentando ahora) es innecesaria y auto-infligida.

Por lo tanto, basta.

Tome distancia de cada situación y observe cómo trabaja su mente confabulando, justificando y creando historias y emociones inventadas a su alrededor. Usted está literalmente creando toda su vida en su cabeza. Su vida no es lo que parece, es lo que usted está eligiendo ver.

Todo es perspectiva y su perspectiva está bajo su control. Quizá no sienta que la controla en un primer momento porque las ideas se presentan (desde su inconsciente), pero una vez que aparecen, usted tiene el pleno control de adoptarlas o sumarles emoción o reemplazarlas por otra cosa.

Pero es posible que se resista a creerlo porque es mucho más fácil encontrar a personas de ideas afines que miren la situación de la misma manera distorsionada en que lo hace usted, que confirmarán su idea y le dirán que tiene razón. Siempre se sentirá atraída hacia amigos y compañeros de trabajo que vean el mundo con el mismo filtro que tiene usted porque ansía un reconocimiento.

¿Ha observado que las personas de ideas afines se atraen unas a otras? Los que se quejan y los que culpan a otros siempre terminan siendo amigos. Esto significa que, si usted quiere cambiar su pensamiento y ser más exacta y positiva, quizá deba cambiar sus amigos.

Este es un procedimiento que puede seguir cuando quiera verificar la exactitud de su perspectiva, sus sentimientos e ideas:

1. Hágase esta importante pregunta: “Si dejara de alimentar esta historia y de pensar en ella, y en cambio la considerara inexacta y la olvidara, ¿el problema seguiría existiendo?” Pruebe y vea.

2. Hágase responsable de lo que siente, sin culpar a nadie. Si se hace cargo, también tiene el poder de cambiarlo. Wayne Allen, el tipo del Zen simple, dice que es extraño que los individuos vivan sobre una pila de basura e insistan de todos modos en que apareció por arte de magia, que no tuvieron que ver con el hecho de estar ahí, que la culpa la tiene otro y otro debería sacarlos de ahí. Si usted vive de esta manera, siempre será una pobre víctima. No lo haga. Hágase cargo de que está creando su vida y cambie su pensamiento.

3. Escriba los datos concretos de su situación sin ninguna emoción ni historia alrededor. Se sorprenderá de lo breves, simples y benignos que son, en realidad, los hechos concretos.

4. Escriba todas las opciones de perspectivas que se le ocurran. Vuélvase creativa y deje que su imaginación delire con derivaciones positivas que pueda adoptar. De todos modos, creará una historia en torno de esta situación, de modo que le conviene elegir una historia mejor y menos miserable que la haga sentir bien, ¿cierto? Elija una historia triunfante que le dé la posibilidad de estar a la altura de la ocasión y ser la persona que quiere ser.

5. Alimente las actitudes positivas estando con personas que ven las situaciones claramente y no son propensas al dramatismo o la negatividad. Alimente su mente con buenos libros y contenido edificante que la estimule a crear perspectivas positivas.

La mayoría de nosotros somos desdichados porque no conocemos otra manera de pensar nuestras experiencias. Nunca nos enseñaron los recursos ni nos dieron las herramientas para procesar la vida de manera más positiva. Esas cosas no se enseñan en la escuela o en la iglesia (aunque deberían), ¿de dónde podría aprenderlas, entonces?

Si tiene reacciones emocionales y se siente a menudo fuera de control o atascada en un pensamiento negativo, es hora de que haga algo al respecto. Busque ayuda profesional. Hay expertos a su alrededor que le pueden enseñar a aprender estas habilidades. Creo que el pensamiento positivo, claro y preciso, libre del miedo, es fácil de aprender y de enseñar.

Usted puede hacerlo.