Solicito líder con el siguiente perfil:

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Solicito líder con el siguiente perfil:

Falleció Jesús María Ramón Valdés, un líder visionario, íntegro, que se propuso crear empleos y fuentes de trabajo sin más herramientas que su habilidad y patrimonio, forjando hace más de 30 años un futuro para el desarrollo laboral de Coahuila, descanse en paz viejo compañero de armas.

Confundidos ante los avances de la falta del necesario compromiso para aportar y sembrar, transcurren los lentos días en la vacilación, en la desconfianza y la crítica en el que va adelante.
Entregando nuestra decisión a otros siempre, en el ejercicio de te doy mi voto o mi mando para que tú lo administres, no esperamos el necesario tiempo y emergemos en la opinión negativa sobre el líder.

Nuestra falta de acción, la excusamos con la dación de poder o mandato a quien haga por nosotros y luego no aguantamos.

Las escuelas de liderazgo son escasas y a veces llegamos tarde a ellas, por lo que cuando nos percatamos ya echamos bastantes cosas fuera de borda o dejamos de hacer unas imprescindibles y ahora ¿qué?

El líder actual es una mezcla, más bien garapiñado de tendencias y de maneras, nos traduce, pero no de material propio sino de otros. Seguimos pues, los pasos ganados y perdidos de quienes nos invadieron con sus ideas y sus defectos, también sus miedos y desaciertos, refiere Mandela que: “Es mejor liderar desde atrás y poner a otros al frente, especialmente al celebrar una victoria cuando pasan cosas buenas. Tú tomas la primera fila cuando hay peligro.  Entonces las personas apreciarán tu liderazgo”. 

Ser líder conlleva a una profesión importante en cualquier aspecto de nuestra vida social, familiar y laboral. Nacer con habilidades o hacerse con tesón, no interesa a la hora de guiar a las personas y las actitudes.

Hace años recibí un regalo excepcional de manos de mi tío Joel Müller, en la pequeña caja el libro: Forjando Voluntades de O.S. 

Marden, tratado acerca de las inmensas posibilidades de aquellos que hacen de la voluntad un arte y de la constancia una filosofía.

La imagen del líder es su primera estrategia, le siguen sus ideas y lo finalizan sus logros, cuando el líder se extravía, en estos tiempos, ya no puede virar y entonces inventa.

La tendencia ya no sólo es moda, sino también hábito y el líder sabe que la constante actualización de sus privilegios y capacidades, es la fórmula de continuar con su presencia en el ambiente en el que se maneja.

Actuar, convivir y diseñar son términos que le acompañan entre la enredada forma que otorga este mundo que da en llamarse moderno y que se vanagloria de serlo considerado así.

El vacío en el liderazgo de nuestro País, por ejemplo, aunque reflejo de una voluntad popular para acomodar y controlar al Ejecutivo, ha originado que el diseño de nación no sea posible lograrlo, por la ausencia de un consenso y su esquema.

Hace siglos y no precisamente al inicio de los tiempos, Lao Tse recalcaba la necesidad de que el líder fuera transparente y ágil y así lo refiere en su Tao: “Ya sea que estés dirigiendo un grupo o simplemente llevando tu vida diaria, debes ser consciente. Tienes que estar consciente de lo que está sucediendo y como pasan la cosas. Si así lo estas, puedes estar en forma acorde con ello. 
Puedes evitar los problemas y ser vital y eficaz. Recuerda que también tu eres un proceso natural. Tú vida se desenvuelve de acuerdo con el mismo principio que regula cualquier otro desenvolvimiento, y saber cómo funciona esa universalidad y tener la sensatez de actuar conforme a ello es la fuente de tu poder, tú resistencia y tu excelencia. La consciencia, por lo tanto, es la fuente de tu capacidad. Aprende a ser cada vez más consciente”.

La necesidad de tener un líder surge y late en Mexico, la posibilidad de encontrarle y entenderle sera motivo de muchos más procesos de los que imaginamos, ojalá y no el de una revolución, por esta vez.