Sistema Nacional Anticorrupción: Es la hora de acabar con la corrupción

Las Fiscalías Anticorrupción eran necesarias porque antes sus funciones las hacía el propio Ejecutivo y su independencia es esencial
Fotos: Héctor García

TEXTO: ARMANDO RÍOS / FOTOS: HÉCTOR GARCÍA

 

Las instituciones de justicia que ya tienen los elementos legales para combatir y castigar la corrupción en México, deben dejar de “echarse la bolita” unos a otros y asumir sus responsabilidades para combatir el problema más grave del País: la corrupción.

Octavio López Presa, presidente del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción (SNA), destacó lo anterior en una entrevista para VANGUARDIA, durante una visita a Saltillo.

En su estancia, López Presa, acompañó a los integrantes del Sistema Estatal Anticorrupción (SEA) a crear acuerdos, presentar la revista ‘Azimut’ y, como prueba piloto a nivel nacional, asistió también a la presentación de plataforma para la firma de códigos de ética en Coahuila.

El titular de SNA tuvo oportunidad de sostener encuentros con organismos civiles, empresariales y académicos de la entidad para conocer cuál será la participación de los sectores sociales, y cuál la exigencia sobre las fallas o aciertos del sistema que preside después de tres años.

“Está la posibilidad de intercambiar, cada uno desde su perspectiva, cómo ven los avances o lo que falta por hacer en el Sistema [Anticorrupción] en Coahuila”, explicó Ana Yuri Solís, presidenta del capítulo ciudadano del SEA a nivel estatal.

Dentro de su agenda, el presidente del Comité Coordinador desde el lado de la ciudadanía, detalló cuáles son los retos más importantes, los plazos en los que se pretende empezar a rendir frutos, la dinámica con el nuevo Gobierno Federal, y también si es que existe la posibilidad de llegar a una utopía: la muerte a la corrupción.

¿Cómo va la estrategia nacional? ¿Qué avances se han tenido desde que asumió la Presidencia del Comité? y ¿Qué representa actuar en un nuevo gobierno? Fuimos los que invitamos a la construcción del Comité Coordinador Nacional y este ejercicio se fue multiplicando. A Jaqueline Peschard le tocó hacer esta convocatoria. Después, a Mariclaire Acosta le correspondió hacer la integración en una red de todos los comités de participación ciudadana en el País. A mí lo que me está tocando es ver que los Comités de Participación Ciudadana están conformando a los Comités Coordinadores de los Estados, entonces ya hay instituciones en el día a día que trabajan en el combate a la corrupción y a los hechos, ya con casos concretos o en la formación de una política estatal. Ha sido un proceso evolutivo, y dado que ya hay cerca de 200 instituciones que están trabajando, mi tarea es crear un rumbo; ejes de trabajo que le den una dirección al sistema en su conjunto.

Hay un plan que titulé “Las 4I’es”: Trabajar en la Independencia a Imparcialidad de las instituciones; Impulsar una cultura de ética e integridad con los ciudadanos; trabajar con la Información del Gobierno y aplicar las tecnologías de punta y tratar de impulsar políticas que lleven a los gobiernos a limitar el uso de efectivo (el efectivo aumenta la corrupción, los fraudes y la delincuencia), y el último propósito es bajar los índices de corrupción del País que afecta tanto a las personas como a las empresas.

En una entrevista con The New York Times, la primera presidenta del Comité de Participación Ciudadana dijo: “Me dieron toda la responsabilidad y nada de poder”. ¿Cómo es hoy? La percepción de corrupción de la gente ha aumentado. Debo de reconocer que hoy tengo una posición más optimista en estos momentos, porque veo un enorme entusiasmo de muchos actores de empezar a hacer cosas. Estoy haciendo a nivel nacional lo mismo que vine a hacer en Coahuila; es decir, venir con el Consejo de Participación Ciudadana, cámaras empresariales, gremios, jóvenes y medios de comunicación. Y noto mucho interés en que los sistemas anticorrupción funcionen y den resultado, y esto es algo muy alentador.

Sí, estamos partiendo de algo bien diferente de lo que teníamos como País hace cuatro o cinco años, donde para que los ciudadanos interactuáramos con las instituciones teníamos que pedirles el favor y ahora es muy diferente. Ahora las instituciones se reúnen con nosotros periódicamente, ya no tenemos que pedirles el favor. Si bien esto no está dando resultados de inmediato, es un paso en la dirección correcta, y también era de alguna manera “sobreoptimista” pensar que de la noche a la mañana todo iba a cambiar y ser diferente. Sí creo que estos avances pueden tener una capacidad de hacer eventualmente transformaciones importantes.

Dijo que era ‘sobreoptimista’ esperar que de manera inmediata ocurrieran cosas, ¿cuál sería un plazo realista? Este año ya podremos ver cosas, porque ya están trabajando los comités coordinadores. Ya están en muchos casos nombrados los fiscales anticorrupción; ya están prácticamente las piezas, ya se pueden hacer investigaciones y seguramente en muchos estados, como Coahuila, ya hay cientos casos, igual que a nivel federal.

En Coahuila ya hay hasta rezago… Es natural porque necesitamos todas las piezas. Además hay que tomar en cuenta que, como tal, los delitos de corrupción no existían hasta que no se nombrara al Fiscal Anticorrupción Federal y esto ya se hizo. Ya propiamente ahora podemos empezar a perseguir con nombre y apellido a quienes hayan cometido actos de corrupción.

Dado que es un sistema que cuesta, ¿cómo va a percibir la ciudadanía que el Sistema realmente rindió frutos? En Coahuila sucedería si decimos que se castigó a alguien por la deuda pública. Obviamente tiene que dar resultados, pero hay dos cosas que me gustaría separar. Sí se ha criticado, y yo creo que sin razón, que los Sistemas son caros, y no es cierto porque realmente no se crearon nuevas instituciones más que una -y que era realmente necesaria- como son las Fiscalías Anticorrupción. ¿Por qué eran necesarias? Porque sus funciones las hacía el propio Ejecutivo, y bueno, sí hay que decirlo: los Ejecutivos estatales y el federal, no son los mejores para encaminar los esfuerzos anticorrupción, porque vienen de un origen partidista. Y lo que ha sido exitoso a nivel internacional es cuando las instituciones de justicia son absolutamente imparciales, que no están politizadas y no son partidarias, y es lo que buscamos. Sí, hacía falta también porque las Fiscalías ya estaban tan ocupadas persiguiendo otros delitos, que relegaban y pasaban a un segundo plano, o a uno tercero, la persecución de los delitos de corrupción.

Las 4I’es:

> Independencia e imparcialidad en el trabajo de las instituciones.

> Integridad con los ciudadanos, e impulso a una cultura de ética.

> Información del Gobierno para aplicar las tecnologías de punta.

> Índices de corrupción del País deben reducirse.

 

‘Sistema Anticorrupción dará frutos antes que termine 2019: Octavio López

Octavio López Presa, presidente del Comité de Participación Ciudadana del Sistema Nacional Anticorrupción, sostuvo que antes de que concluya 2019 saldrán a la luz púbica casos donde se tomarán acciones muy relevantes en el nivel federal, pero también en los estados.

¿Cómo es la disposición del nuevo Gobierno Federal? Las reuniones son públicas, hemos tenido dos. Creo que hay un compromiso con el Sistema Nacional Anticorrupción y eso yo creo que es una muy buena noticia. Es decir, creo que el nuevo gobierno que acaba de entrar a nivel federal está dando por hecho que el Sistema existe y que tiene que trabajar con él y eso es algo muy positivo.

Si el Presidente [Andrés Manuel López Obrador] sintetiza su plan de Gobierno, su plan sería acabar con la corrupción, pero prácticamente nunca habla del Sistema Nacional Anticorrupción, ¿de verdad es un buen aliado? Yo creo que él está en su legítimo derecho de hablar del tema y claro que tiene que plantear que debe acabar con la corrupción. Pero él es el Ejecutivo Federal y hay 32 entidades federativas que son soberanas, y donde hay instituciones, organizaciones donde el Ejecutivo Federal no se puede meter. Qué bueno que tenemos un Presidente comprometido con el tema; pero él va a estar seis años. Ha habido muchos Presidentes muy comprometidos con acabar con la corrupción: Miguel de la Madrid, [Carlos] Salinas…, que empezaron con bombo y platillo diciendo que acabarían con la corrupción pero, repito, al cuarto año no quieren saber del tema. Con esto garantizamos los ciudadanos a que no se nos olvide que tenemos que lograr pequeños triunfos todos los días.

Hay que decirlo: los Ejecutivos estatales y el federal, no son los mejores para encaminar los esfuerzos anticorrupción, porque vienen de un origen partidista. Y lo que ha sido exitoso a nivel internacional es [que] cuando las instituciones de justicia son absolutamente imparciales, que no están politizadas y no son partidarias, y es lo que buscamos”.
Octavio López Presa, presidente del Comité de Participación Ciudadana.

¿Cómo es el papel de las organizaciones civiles? De pronto hay situaciones reacias entre ellas y el Ejecutivo Federal ¿Qué tan importantes son para ustedes?
A nivel internacional, las organizaciones de la sociedad civil han jugado un papel determinante en el combate a la corrupción, pero también en el progreso democrático de los países, y en asegurar que se respete el Estado de Derecho. México necesita más ciudadanía, debe promover más la participación social de todos los ámbitos y todos los sectores.

¿Qué nos garantiza que no se echará para atrás este Sistema [Nacional Anticorrupción] tal y como sucedió con la Reforma Educativa? No nos lo garantiza nada, pero creo que si como ciudadanos le apostamos a esto y logramos empezar a convencer, creo que podríamos hacerle ver que si quiere hacer eso, va a ser un enorme retroceso y va a quitar a los mejores aliados que tiene. Y además los ciudadanos que formamos parte de los sistemas estatales y del sistema nacional no somos políticos, somos ciudadanos de a pie, y que tenemos alguna experiencia positiva en el tema y que hemos trabajado en ello.

¿Cómo garantizar esta parte?
Hemos visto dentro de los consejos gente que viene de instituciones, que no necesariamente tenía una carrera independiente. No es tan fácil generar ciudadanos que tengan la posibilidad de tener la manutención y una actividad socialmente activa en estos temas. Para eso se requiere una cierta evolución. Hay estados donde la iniciativa privada tiene un peso importante y, bueno, han creado organizaciones sociales no solamente para defender sus intereses sino para vigilar la actuación gubernamental y en esos estados, donde hay una cierta coincidencia con el norte del País, pues sí, hay mayores elementos de donde sacar ciudadanos de la sociedad civil. En otros estados donde hay un desarrollo económico menor, pues no es tan fácil, pero se está haciendo el intento, y se está empezando a lograr crear le necesidad de que sí haya ciudadanos que sean neutrales y sean una voz independiente de los gobiernos.

Hace tres lustros que llegó el INAI [Instituto Nacional de Acceso a la Información], y con ello los ciudadanos no hemos sentido que la transparencia haya sido eso que nos prometió, ¿cómo evitar llegar a la decepción con este Sistema Anticorrupción? Haz dicho algo que conviene analizar. Desde luego que las instituciones nacionales y estatales, aunque habrá casos de excepción, pero en general los organismos garantes de la transparencia han hecho su trabajo. Han revelado, han permitido que la corrupción se conozca, no es su papel combatirla: su papel es asegurar que la información esté ahí para que no puedan de alguna manera ocultarla y sea del conocimiento público. Lo que ha faltado son instituciones que sancionen.

La insatisfacción es con los resultados de los gobiernos, y a lo mejor se tiende a mezclar todo, pero creo que México como país está internacionalmente reconocido por haber hecho grandes esfuerzos y logros en materia de acceso a la información y transparencia. Ahí, sus calificaciones son altas, donde son bajas es en la impunidad. Y esa es la tarea pendiente, por eso es que surgen los Sistemas Estatales y Nacional Anticorrupción, para remediar esta deuda pendiente que tiene el Estado Mexicano, la sociedad y el País en el combate a la corrupción, y que de alguna manera nos ha puesto en un sitio vergonzante. Pero, bueno, y tengo fe en que ahora, estando en manos de la ciudadanía el combate a la corrupción, en el mediano o largo plazo, va a ser, desde mi perspectiva, la solución correcta, porque en los últimos 50 años, por lo menos hemos pensado que llega “el salvador” sexenio tras sexenio, a nivel federal o estatal, y desde luego que muchos de ellos empiezan con casos espectaculares, pero para el tercer o cuarto año de sus gobiernos no quieren saber nada del tema. Ha sido una estrategia fallida darles a los gobiernos las tareas anticorrupción.

¿Cuánto tiempo va a costar quitar la percepción de corrupción de la ciudadanía? Hay que empezar a dar resultados. Antes de que se acabe el año vamos a empezar a ver casos donde se va a empezar a tomar acciones muy visibles, y muy relevantes a nivel federal, igual en los estados. Yo estoy viendo que en los estados ya está habiendo una presión social y una cierta organización local para hacer algo.

Tras las declaraciones hechas por Octavio López Presa, su contraparte coahuilense, Ana Yuri Solís, concluyó señalando que, en esa tesitura, las organizaciones y el Consejo de Participación Ciudadana local se encuentran trabajando para que no haya marcha atrás luego de los avances alcanzados.

“Hay una reingeniería que hoy no se ve, pero dará frutos, de tal manera que sí se combate de raíz el problema y no solamente estemos pensando en meter a la cárcel a ciertos actores -que muchas veces toman al eslabón más débil de la cadena, y no logra quitar de raíz el problema-: el Sistema Anticorrupción a eso apuesta”.