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Sirenas antiaéreas recuerdan el Holocausto en Israel
Las sirenas antiaéreas resonaron hoy en las ciudades israelíes para recordar a los seis millones de judíos muertos durante el Holocausto, en una jornada de luto en la que también se recitaron en actos los nombres de cada una de las víctimas.
Israel conmemora el Día del Recuerdo del Holocausto y del Heroísmo en una jornada nacional que homenajea a estas víctimas con eventos institucionales destinados a repasar uno de los episodios más nefastos de la historia de la humanidad.
Las sirenas antiaéreas sonaron a las 10.00 hora local (07.00 GMT) y durante dos minutos toda actividad se paralizó: los ciudadanos detuvieron su paso en el instante en que el ulular retumbó y todo el transporte se detuvo en señal de respeto.
"Esto (el sonido de la sirena) es mi victoria sobre lo que sucedió", dice a Efe un anciano superviviente del Holocausto, Aron Pacherkovechy, que detiene su paso, agacha la cabeza y recuerda cómo con 9 años llegó a Israel tras haber perdido a toda su familia en campos de concentración.
"Llegué solo, no tenía a nadie", repite Aron.
Un total de 6 millones de judíos, lo que representaba dos tercios del judaísmo europeo, fueron aniquilados por la maquinaria nazi durante la Segunda Guerra Mundial.
Los actos en recuerdo de la Shoá (Holocausto, en hebreo) prosiguieron tras sonar las sirenas con la lectura pública de los nombres de las víctimas, una iniciativa que interpreta y pretende mantener vivo en la memoria el nombre de cada una de las personas que murieron.
La lectura de los nombres de los judíos fallecidos se llevó a cabo simultáneamente en el memorial Yad Vashem, institución que guarda el legado y testimonio del Holocausto, y en la Kneset (Parlamento israelí).
El presidente de Israel, Reuvén Rivlin, leyó en la sede parlamentaria los nombres de los soldados muertos en la Guerra de la Independencia, así como los de sus parientes asesinados por los nazis.
El primer ministro, Benjamín Netanyahu, mantuvo, por su parte, su tradición anual de leer un poema de su suegro, Shmuel Ben-Artzi, que lo escribió en 1941 en Israel cuando perdió el contacto con su familia en Europa. Todos ellos murieron en el Holocausto.
Los actos comenzaron anoche con la ceremonia oficial del encendido de seis antorchas por otros tantos supervivientes con el fin de recordar a los seis millones de judíos muertos en el Holocausto.
Durante la jornada se suceden actos institucionales y religiosos en recuerdo de los desaparecidos, consecuencia de la política nazi destinada a exterminar al judaísmo europeo, lo que los jerarcas de ese régimen denominaron la "Solución Final".
Las televisiones locales cortan su programación rutinaria para proyectar distintas películas, documentales y especiales que tratan sobre esa barbarie, y abundan en los testimonios de las víctimas y supervivientes.
Los centros escolares también dedican parte de su programa a rememorar el Día del Holocausto, que se celebra una semana antes del Día de su Independencia, de acuerdo al calendario hebreo, razón por la que no coincide con la conmemoración internacional establecida el 27 de enero.
El 27 de enero de hace 71 años las tropas soviéticas liberaron el campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau.
"La Shoá es algo que nos ha hecho más fuertes de lo que éramos. La mentalidad que tenemos hoy, especialmente en Israel pero también en todas las naciones donde hay judíos, es que somos fuertes", reivindica en declaraciones a Efe el rabino Mani Holtzman, residente en Jerusalén.
Para ciudadanos judíos como el superviviente Aron este tipo de conmemoraciones son importantes porque protegen la memoria histórica y evitan así que capítulos como éste se vuelvan a repetir.
"Viajo cada mes con grupos de adolescentes al lugar de los campos de concentración en Polonia y les explico lo que pasó y cómo paso", comenta el anciano, que, tras sobrevivir al nazismo, ha rehecho su vida y hoy tiene dos hijos y seis nietos.