El 25 de mayo pasado el primer actor de origen británico distinguido con el título de “Sir” Ian McKellen estuvo de manteles largos por haber llegado a las ocho décadas de vida.

Aunque los grandes públicos a nivel mundial lo conocieron a partir de este nuevo milenio al protagonizar famosas sagas de películas como las de “X-Men” (Bryan Singer, 2000), donde interpretó al villano Magneto o “El Señor de los Anillos” (Peter Jackson, 2001) donde personificó al inolvidable Gandalf, papel que le dio una nominación al Oscar al Mejor Actor de Reparto de su año, en realidad comenzó a hacer historia desde muy joven y no es para menos, puesto que le tocó foguearse con primeros actores compatriotas suyos que dejaron una imborrable huella primero en el escenario teatral y después también en el cine como fue el caso de Laurence Olivier, Wendy Hiller, John Gielgud y Ralph Richardson, entre otros.

El debut en el cine del maestro McKellen no pudo ser más afortunado ya que se dio en el año de 1969 al lado de la ganadora del Oscar Sandy Dennis (“¿Quién le teme a Virginia Woolf?”) en la cinta “A Touch of Love”, de Waris Hussein; para mediados de los años 80 actúa con otra ya para entonces dos veces ganadora de la estatuilla como  Meryl Streep en la cinta “Plenty”, de Fred Schepisi, en 1985, y en 1988 hace pública su homosexualidad durante una entrevista con la BBC en la que se discutía el Artículo 28 impuesto por la entonces primera ministro Margaret Thatcher donde tratar temáticas homosexuales podía considerarse un delito siendo un activista de dicha causa desde entonces y obteniendo su primera nominación al Oscar precisamente por un personaje gay en “Dioses y Monstruos” (Bill Condon, 1998).

Hablando de cine y activismo gay, quien hubiera llegado a los 85 años de vida el pasado 29 de mayo fue la dramaturga, cineasta, poetisa y también pionera del activismo por los derechos de los homosexuales en México Nancy Cárdenas, quien nació en Parras de la Fuente, Coahuila, el 29 de mayo de 1934 y quien siendo una apasionada del Séptimo Arte realizó un largometraje documental bajo el auspicio de la asociación PECIME (Periodistas Cinematográficos de México) titulado “México de mis amores”, de 1978, luego de haber sido a su vez una de las pioneras junto a actores como Alfonso Mejía de “Los Olvidados” de festivales de cine que promovía a nivel nacional dicho organismo en conjunto con COTSA así como la gestión de festivales y las muestras internacionales de cine como las conocemos en la actualidad.

Todo esto viene a colación con una nota muy desafortunada que se dio a conocer en el curso de la semana pasada también de la cancelación de la entrega de este año de las Diosas de Plata que año con año organiza PECIME a lo mejor en cine mexicano del 2018, el equivalente nada menos que los Globos de Oro, debido a la falta de apoyos ya “apalabrados” con el IMCINE aparentemente por las políticas de austeridad que el ejecutivo federal está realizando al sector cultural. Ya estoy viendo la reacción de una personalidad tan aguerrida como Nancy Cárdenas para con una asociación como PECIME que de alguna forma dio lugar a mucho de las políticas culturales en relación al cine que hoy promueve … o no.

Comentarios a: tesse_69@hotmail.com