Líderes en líneas de operación del sector automotriz denunciaron que una gran parte de los trabajadores que eran regresados a casa al presentar un mínimo síntoma de COVID-19 dedicaban el día para salir a la calle o conseguir otro trabajo temporal, y no se les daba un seguimiento epidemiológico.

“La empresa lo hace para extremar precauciones, porque no hay un brote aquí adentro y cuidar de su salud y del empleo que aún conservan como para que saliendo de aquí se vayan a la calle”, expresó uno de los líderes de una armadora ubicada en Derramadero.

Mientras que trabajadores de otras armadoras, aseguraron que el paro técnico sí es probable, ante el repunte en los casos de coronavirus en la Región Sureste, pues aunque no hay baja en las ventas, el paro técnico es una medida de prevención.

Por su parte un empleado de una de las automotrices, señaló que las medidas son tan estrictas en esas y otras empresas de la industria que en ocasiones se ven obligados a buscar “chambas” del día o temporales, pues el recorte de salarios continúa.

“Se pone uno a trabajar en su casa o haciendo chambas para sacar lo del día, yo no me siento mal y me regresaron a la casa, las pruebas están caras no podemos pagarlas, no nos queda más que esperar y en eso trabajar por fuera”, consideró.

Al consultar con las armadoras sobre protocolos que han tomado, la única que respondió fue General Motors, quien informó que tienen certeza de que trabajadores no se han contagiado al interior, ya que han reforzado su protocolo en sus ingresos.