El Instituto de Pensiones para los Trabajadores al Servicio del Estado está siendo sometido a un estudio actuarial, que deberá arrojar las directrices a seguir sobre las modificaciones en las políticas pensionarias de la institución.

“Encontramos un instituto ordenado, trabajando, con los objetivos muy claros, y precisos de lo que se tiene que hacer, pero no podemos quedarnos cruzados de brazos y debemos seguir generando políticas en este aspecto”, expresó José Luis Moreno Aguirre, recién nombrado director.

Aunque el Instituto está al día en sus obligaciones, admitió que la nueva realidad, como el incremento en la esperanza de vida debido a los avances médicos, entre otras cuestiones, obliga a ver a futuro.

Actualmente, informó, el Gobierno de Coahuila a través de esta dependencia destina poco más de 15 millones 347 mil pesos mensuales para el pago de las pensiones de 2 mil 290 personas, de las cuales el 63 por ciento son 
mujeres.

“Lo más importante es que hemos solicitado un estudio actuarial que nos ubique precisamente en dónde estamos para buscar las diferentes alternativas hacia dónde queremos ir; estamos a la espera de recibir esta información precisa, completa en este sentido”, recalcó.

Dijo que es cuestión de semanas para recibir dicho informe y que cuentan con la asesoría y respaldado desde hace muchos años de un coahuilense a quien calificó de ejemplar en la materia: Francisco Miguel Aguirre.

Moreno recordó que el objetivo primordial del Instituto de Pensiones es y seguirá siendo la seguridad social, que se lleva a cabo a través de la parte financiera y la parte política, y otra parte fundamental que es la humana. Dijo que actualmente, la edad de jubilación de un trabajador del estado es de 55 años, siempre y cuando tenga un mínimo de 12 años de servicio.

Aunque admitió que el estudio actuarial pudiera arroja conclusiones que impliquen reformas al marco legislativo y a su vez a la modificación de año de servicio, Moreno Aguirre expresó que no desea generar ninguna expectativa en torno a ese tema.