La Armada argentina anunció hoy que ya no buscará sobrevivientes del submarino ARA "San Juan" que desapareció el 15 de noviembre con 44 tripulantes a bordo en aguas del Atlántico Sur.

El Ministerio de Defensa y la Armada decidieron poner fin al operativo de búsqueda y rescate de sobrevivientes, informó el portavoz de la Armada Argentina, Enrique Balbi, en Buenos Aires.

"No se encontró evidencia alguna del naufragio en las áreas exploradas ni se obtuvo contacto con el submarino ni con sus balsas", declaró, en una decisión que generó profundo dolor en los familiares de los tripulantes.

El plan de búsqueda y rescate (SAR) tiene como misión ejecutar el rastreo y salvamento de personas en peligro en el área marítima fluvial y lacustre con el fin de preservar la vida humana en el mar, explicó el marino, quien advirtió que "se ha extendido a más del doble la cantidad de días que determinan las posibilidades de rescate de la dotación". Según había informado días atrás, las reservas de oxígeno disponibles en el submarino podían alcanzar para siete días en inmersión.

A pesar de la magnitud del operativo internacional, que con 4,000 hombres y 18 países en apoyo rastrilló 557,000 millas náuticas cuadradas en exploración visual y más de un millón de millas náuticas cuadradas a través de radares, "no ha sido posible localizar el submarino", lamentó.

Por ello, la Armada decidió poner fin al plan de búsqueda y rescate y se continuará "con la siguiente fase que comprende la búsqueda del submarino 'San Juan' en el lecho submarino", precisó el portavoz.

El miércoles ya se había decidido achicar la superficie de búsqueda a sólo unos 40 kilómetros cuadrados y hoy sorprendió el regreso al puerto de Comodoro Rivadavia de dos buques noruegos que participaban en el operativo.

Los familiares expresaron su sorpresa por la decisión de la Armada argentina, ya que no todos habían sido informados de la determinación de poner fin al rescate de los 44 tripulantes.

"A mi nuera no le dijeron nada, ella se enteró por los medios", declaró Jorge Villarreal al canal noticioso TN.

El padre de un joven tripulante expresó en tanto su estupor y dolor por la noticia. "Me destruyó la mínima esperanza que tenía porque dijeron que no van a intentar salvarlos aunque encuentren el submarino", declaró Luis Tagliapietra, padre de uno de los 44 tripulantes, a la emisora.

"No comprendo esta decisión arbitraria e injustificada", expresó. "Quiero saber la verdad de qué pasó, no creo ninguna de las hipótesis oficiales porque nos mienten", agregó Tagliapietra.

En tanto, un grupo de familiares que se encontraba en la Base Naval Mar del Plata, 400 kilómetros al sur de Buenos Aires y donde opera el Comando de la Fuerza de Submarinos de Argentina, se retiró en silencio y con muestras de dolor al momento en que el portavoz de la Armada anunciaba el fin del rescate de la tripulación.

El ARA (Armada República Argentina) "San Juan" se comunicó por última vez el 15 de noviembre, cuando navegaba rumbo a la Base Naval Mar del Plata tras haber partido la semana anterior del puerto de Ushuaia, en el extremo austral de Argentina.

Ese día, el capitán reportó que había ingresado agua de mar y que eso había generado una avería en el sistema de baterías de proa. Se registró un principio de incendio que, según informó poco después, pudo ser subsanado.

El submarino continuó navegando con la propulsión de las baterías de popa.

Según informes de organismos internacionales, pocas horas después de esa última comunicación, se registró una explosión a pocas millas de la última posición conocida del submarino, frente al golfo San Jorge, a 430 kilómetros de la costa argentina y unos 1,300 kilómetros al sur de Buenos Aires.

El ARA "San Juan" fue construido en Alemania y entró en servicio para la Armada argentina en 1985. Mide 65 metros de eslora y siete metros de diámetro y funciona con propulsión diésel-eléctrica. Entre 2008 y 2014 se le realizó una reparación de media vida para prolongar sus años de servicios y, entre otras cosas, se renovaron las 960 baterías que utiliza.

Tristeza y enojo en las familias de marinos del submarino argentino
Familiares de los 44 tripulantes del submarino ARA "San Juan", desaparecido el 15 de noviembre en el Atlántico Sur, expresaron hoy tristeza y enojo al conocer que la Armada argentina finalizó el operativo de búsqueda y rescate de sobrevivientes.

"La forma en que comunicaron la decisión nos causa tristeza y angustia. No fue la adecuada. Pero tenemos que ir paulatinamente aceptando la realidad", expresó Jorge Villarreal, padre de Fernando Villarreal, uno de los marinos que integraban la tripulación.

En declaraciones al canal Todo Noticias, Jorge Villarreal dijo que conoció la suspensión del operativo de búsqueda por los medios de comunicación y no por la Armada.

Por su parte, Luis Tagliapietra, padre de Alejandro Tagliapietra, otro de los submarinistas del ARA "San Juan", dijo sentirse "manipulado" por la fuerza militar.

"Siento que nos manipularon desde el primer día. Nos mintieron y no nos dijeron toda la verdad. No sabíamos que iban a tomar la decisión de abandonar el rescate", afirmó, también al canal Todo Noticias.

Luis Tagliapietra se reunió este miércoles en la ciudad patagónica de Caleta Olivia con la jueza federal Marta Yáñez, a cargo de la investigación por la desaparición del submarino, para constituirse, junto a otros familiares, como querellantes en el caso.

"Nos juraron que no había pasado nada, que era solamente un problema de comunicación", criticó en declaraciones a radio Continental, de Buenos Aires.