Monclova, Coahuila.- Luego que un grupo de simpatizantes del candidato independiente a la alcaldía de Monclova, César Flores, presuntamente fueron golpeados por un funcionario público y policías al tratar de exponer actos de corrupción, las autoridades municipales dijeron desconocer los hechos y evitaron hablar del tema.

"No he visto ningún video ni tengo conocimiento de nada de eso, no veo las redes sociales, no sé ni qué policías ni cuál gente, y no tengo comentarios al respecto porque voy a dar por hecho cosas que desconozco", mencionó el secretario del Ayuntamiento, Martín Blackaller.

Sobre el mismo tema, el alcalde Alfredo Paredes López se limitó a comentar que si los policías hicieron algo indebido deberá investigarse.

"Mano dura a los policías que estén haciendo cosas malas, de hecho el director de Seguridad Pública tiene esa encomienda desde el primero de enero, personas que hagan lo contrario a las indicaciones que su servidor hizo el primero de enero para que sean una policía humana, cercana a la gente, policía en la que se pueda confiar y que no sea recaudatoria, pues que les vaya bien", declaró.

Pese a las intenciones de tener una mejor policía, Alfredo Paredes no habló sobre las sanciones que se aplicarían a los elementos involucrados ni qué pasará con el director de Alcoholes, Sergio Carrizales, a quien las víctimas señalan directamente como uno de los agresores.

El pasado miércoles 28 de febrero por la tarde, tres personas, entre ellos Jesús Vázquez de 22 años, acudieron a un domicilio de la zona centro para evidenciar actos de corrupción en las que estaría involucrada la empresa NC de Monclova, la cual presuntamente cobró más de 50 millones de pesos por obras no realizadas durante la pasada administración, cuando el actual alcalde era el director de Obras Públicas.

Al documentar que no existía el domicilio fiscal de dicha empresa, las personas agredidas relataron que llegaron tres camionetas de las que descendieron el director de Alcoholes y el propietario de NC, José Manuel Cisneros, para golpearlos y quitarles el celular con el apoyo de policías municipales.