Silva (34-8) estaba programado originalmente para enfrentarse a Kelvin Gastelum en su natal Brasil, pero la pelea se cayó cuando se reveló el mes pasado que Gastelum había arrojado positivo por marihuana. Fue suspendido por 90 días.

UFC ofreció a Silva varios rivales de reemplazo, pero no quiso programar un combate por el campeonato interino de peso medio entre Silva y Yoel Romero (12-1), la pelea que públicamente pidió Silva. El ex campeón amenazó con retirarse si la pelea no se llevaba a cabo, pero UFC se mantuvo firme.

La exigencia de una pelea por el título interino de las 185 libras surgió a raíz de la decisión del UFC de programar un combate por el campeonato entre Michael Bisping y Georges St. Pierre, ex campeón de peso wélter que no ha peleado desde el 2013.

Silva ha buscado una pelea contra St-Pierre por años y con gusto la aceptaría ahora, de acuerdo a Guimaraes. Sin embargo, el único interés de St-Pierre tras salir del retiro ha sido enfrentarse a Bisping. ESP