Usted está aquí
Sigue la prensa amenazada en México a un año del caso Javier Valdez
Ha pasado un año desde el asesinato del periodista mexicano Javier Valdez, un experto en crimen organizado cuya muerte no solo causó conmoción en los medios de comunicación, sino que también se convirtió en una simbólica muestra de los ataques a la prensa en México.
El asesinato de Valdez, ocurrido el 15 de mayo de 2017 en su natal Culiacán, estado de Sinaloa (noroeste), además de exponer los peligros que corren los periodistas mexicanos debido a su profesión, exhibe la impunidad en la que quedan muchos de estos crímenes.
Tan solo unas semanas antes del aniversario de su muerte, las autoridades mexicanas anunciaban la detención del presunto asesino de Valdez. Tuvo que pasar casi un año para que encontraran a unos de los posibles autores del crimen y se arrojaran más luces sobre los motivos detrás del asesinato.
Valdez fue asesinado por su actividad como hombre de prensa, por sus "diversos trabajos de investigación periodística, en los que cubría asuntos como narcotráfico y delincuencia organizada", dijo en ese momento el comisionado nacional de seguridad, Renato Sales.
El reconocido periodista, cuyo asesinato llenó de indignación al gremio, fue fundador del semanario "Riodoce", autor de varios libros sobre narcotráfico, recibió varios premios por su labor y colaboró con diversos diarios y agencias de noticias.
Tenía 50 años cuando fue acribillado por hombres armados mientras transitaba por las calles de Culiacán, muy cerca de las oficinas de "Riodoce".
Sinaloa, el estado en el que nació, es también la cuna del capo Joaquín "El Chapo" Guzmán, ex líder del Cártel de Sinaloa.
Y aunque el caso Valdez es, por mucho, el más conocido, no es el único en México, país considerado como uno de los más peligrosos para ejercer el periodismo a nivel mundial y que encabeza el historial negro en América Latina.
Según el informe anual de Reporteros sin Fronteras (RSF), México es "el país más mortífero para los medios de comunicación en América, pese a que la nación no está en guerra". La organización señala, sin embargo, que la presencia de mafias y cárteles genera un "ambiente violento”.
En medio de la violencia de los cárteles de las drogas, la violencia en general se disparó en 2017 en México a los niveles más altos desde que comenzaron los registros hace dos décadas y el año pasado superó su propio récord con más de 29,000 asesinatos.
También se encuentra a la cabeza del ránking de la Federación Internacional de Periodistas (FIP) de los países con más muertes de comunicadores en 2017: México (13), Afganistán (11), Iraq (11), Siria (10), India (6), Filipinas (4), Pakistán (4), Nigeria (3), Somalia (3) y Honduras (3).
En lo que va de 2018, tres periodistas fueron abatidos en México, además de una bloguera -periodista de profesión- que fue tiroteada por supuestamente difundir en su canal de Youtube información sobre un grupo criminal.
Asimismo, Reporteros sin Fronteras tiene un recuento de al menos 21 periodistas desaparecidos desde 2000 en México, ocho de ellos en los últimos diez años.
A inicios del mes, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llamó a las autoridades mexicanas a proteger a los periodistas y acabar con la impunidad de los crímenes contra los informadores.
"De eso depende el futuro de la democracia y el derecho a la verdad en el país", dijo Gianfranco Summa, director del Centro de Información de las Naciones Unidas en México (CINU), durante la primera entrega del premio Breach/Valdez de Periodismo y Derechos Humanos, instituido en honor a Valdez y a Miroslava Breach, otra conocida periodista asesinada el año pasado en el norte mexicano.
De acuerdo con Summa, la impunidad de los ataques a periodistas se ubica en un 90 por ciento a nivel internacional, pero en México el nivel alcanza un alarmante 99 por ciento de casos sin resolver.
"Llamamos al Gobierno mexicano y a todas las autoridades mexicanas a que garanticen la libertad de prensa y protejan a los periodistas y terminen con la impunidad", señaló el director de CINU.
Aunque la ONU y algunas otras organizaciones han reconocido que algunos instrumentos de protección a periodistas se han reforzado en el país, el gremio considera que no es suficiente e incluso denuncia que la situación ha empeorado.
"No se ha hecho justicia ni en este caso (el de Valdez) ni en el de los otros muchos periodistas asesinados en México", dice un periodista en un video, parte de un cortometraje realizado para conmemorar un año del asesinato del fundador de "Riodoce" y en el que participan no solo hombres y mujeres de prensa, sino también intelectuales, escritores y cineastas.
El corto "No se mata la verdad" es solo una de las muchas iniciativas planeadas para conmemorar a Valdez y a muchas otras víctimas, no solo en México sino en toda América Latina.