Sexualidad en libros de secundaria

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Sexualidad en libros de secundaria

Afirma la Asociación de Padres de Familia que hablar (en los libros de texto de secundaria) sobre la masturbación y homosexualidad podrían desalentar el suicidio y el embarazo adolescente. Por favor que me expliquen, ¿Como la masturbación “podría disminuir las tendencias suicidas”?
A lo mejor la presidenta de dicha asociación tiene algún dato o información basada en una investigación científica. En lo que sí creo que tiene razón, es en que disminuye el número de embarazos, aunque de una manera indeseable; desde mi punto de vista.

El libro de texto de secundaria dice así: “Una de las maneras de conocer nuestro cuerpo y percibir sus reacciones se logra mediante la estimulación de los genitales que provoca placer, a esta práctica se le denomina masturbación.”

Bajo esa idea, en un futuro esos mismos libros pueden empezar a incluir cosas como, “una manera de conocer nuestra mente y percibir sus reacciones se logra mediante la estimulación con sustancias que provocan placer, a esta práctica se le denomina drogadicción.”

Una cosa es que los adolescentes se toquen y otra es hacerlo oficial en libros de texto, lo que equivale a una aprobación. Las palabras impresas tienen un gran impacto en los adolescentes que aún están en formación y tienden a creer lo que los libros y sus maestros dicen.

La asociación de padres de familia —no se a cuáles padres representa, quizás a papá gobierno— dice que: “los jóvenes son más abiertos a esos temas. Los papás no podemos quedarnos atrás y no podemos estar con la venda en los ojos toda la vida. Tenemos que prepararlos y tener armas para darles a nuestros hijos, con información correcta.”

Respeto su punto de vista, pero no lo comparto ni pretendo imponer el mío. Sin embargo, creo que no se respeta el punto de vista, ni las creencias de un buen número de padres de familia.

Al imponer las ideas en los textos, se está minando la base de valores de parte de una sociedad que desea conservarlos. No se trata de dejar atrás los valores de uno y cambiar su ideología. 

Precisamente para darles información correcta y armas uno les transmite a sus hijos lo que considera es bueno para ellos.

El problema empieza cuando no se respeta eso y se trata de imponer lo contrario. Se debe respetar si yo, o alguien más, decidimos creer en que “la masturbación es una falta grave contra el amor, porque convierte el placer sexual en un fin en sí mismo y lo desvincula del desarrollo integral personal en el amor entre varón y mujer.

Por eso el “sexo con uno mismo” es una contradicción en sí misma. Es un acto con cierto grado de egoísmo, que deja a la persona vacía, al solo obtener placer y no darlo.

El autoerotismo no es cualquier cosa. Muchos jóvenes y adultos están en riesgo de aislarse en el consumo de imágenes y películas pornográficas, en lugar de encontrar el amor en una relación personal.

La soledad puede llevarlos a un callejón sin salida, en el que la masturbación y la pornografía se convierten en una adicción. Nadie es feliz siguiendo el lema: no necesito a nadie para el sexo, me lo hago a mí mismo, como y cuando lo necesito.”

La inmadurez afectiva, la fuerza del hábito y la angustia son factores que llevan al adolescente a masturbarse.

No demos luz verde para que se queden en ese estado o lleguen a cosas peores como el abuso de menores, o la violación.

La pornografía les hace ver a las personas como objetos de placer que se venden en un mercado. La sexualidad no es un juego, ni un tema de no quedarse atrás.

JESÚS H. GONZÁLEZ
ECOS DE LA CIUDAD