Elon Musk, el cofundador de Tesla, SpaceX, Hyperloop y de una buena cantidad de otras empresas, todas de una alta tasa de innovación, enumera sus predicciones sobre el futuro del mundo y una posible tercera guerra mundial, alimentada, e incluso provocada por la misma inteligencia artificial.

Los puntos de partida son dos: Primero, por el enésimo test atómico de Corea del Norte, esta vez devastador,  una bomba de hidrogeno explotó en la montaña de Punggye-ri, que ha provocado un par de terremotos en diferentes lugares, valuados en 6.3 y 4.6, grados de la escala Richter.

Y en segundo, por las declaraciones  de Vladimir Putin, que en el curso de un discurso transmitido el viernes pasado a un millón de estudiantes rusos por la inauguración del año escolástico, según el cual “la inteligencia artificial es el futuro, y no solo para Rusia, sino para todo el género humano. Conlleva enormes posibilidades, pero también amenazas que son difíciles de prever. Cualquiera que se vuelva líder en este ámbito, será el soberano del mundo”.

Musk, quien también está profundamente involucrado en el sector, basta pensar en la automatización de sus autos Tesla, sobretodo crítico sobre los riesgos conectados al desarrollo de redes neuronales cada vez más sofisticadas e inteligencia artificial, desembocando en un camino decisivo de plena autonomía sin la supervisión del hombre.

Hace unos días hizo un llamado a la ONU, para detener la carrera de armamentos autónomos firmados con otros 116 empresarios y expertos reunidos en la conferencia internacional Conjunta sobre Inteligencia Artificial en Melbourne.

El día de hoy en su perfil de twitter, relanzó un artículo sobre frases de Putin y después inició una larga discusión, en la cual ha continuado con diversas replicas, sobre su argumento. “China, Rusia, y todas las naciones fuerte en informática” desarrollaran sistemas de inteligencia artificial, se lee.

“La competencia por las superioridad podrá causar la tercera guerra mundial”. El mensaje escondido en esta competencia, corre el riesgo de ser más compleja y peligrosa para el destino de la población mundial, que lo que ocurre con Corea del Norte.

Más adelante, Musk ha vuelto a enfatizar, como una suerte de predicción apocalíptica de la llamada singularidad tecnológica, que es el momento en que la inteligencia artificial supere a los humanos.

“Un nuevo conflicto internacional podría ser iniciado no por los diversos líderes mundiales, sino por uno de sus sistemas de inteligencia artificial, si esto llegara a decidir que un ataque preventivo es el camino ideala la victoria” apuntó Musk.

La principal preocupación de la comunidad internacional y los debates del Consejo de Seguridad convocado para hoy, podría provocar un conflicto a escala planetaria, parece muy poco probable para Musk: “Sería suicida para su líder, tuiteó el jefe de Tesla, Corea del Sur, Estados Unidos y China invadirían inmediatamente a decapitar al régimen”.

Varios usuarios siguen escépticos acerca de esta lectura de los hechos, e hicieron hincapié en que poner el tema de Corea del Norte, parece muy poca cosa.

Con información de Repubblica