CDMX.- La ambiciosa agenda de reformas del presidente Andrés Manuel López Obrador, que incluye tres importantes enmiendas constitucionales, enfrenta un camino difícil a través de un Congreso dividido, donde los partidos tienen poco apetito por llegar a un consenso, dijo el líder de la mayoría del Senado, Ricardo Monreal.

“Será complicado. No estoy rebosante de optimismo, soy cauteloso”, dijo en una entrevista con Bloomberg News ayer al hablar de las prioridades legislativas del gobierno en la segunda parte del sexenio.

López Obrador, quiere aprobar cambios constitucionales para fortalecer la empresa estatal eléctrica CFE y reducir la influencia de los operadores privados en el mercado eléctrico, así como reformar el sistema electoral e integrar a la Guardia Nacional en la Secretaría de la Defensa. Sin embargo, su coalición gobernante perdió la supermayoría necesaria para tales reformas en las elecciones del 6 de junio, lo que convirtió el objetivo en una batalla cuesta arriba.

“Fue un buen resultado con algunas manchas que deben ser atendidas. Son llamadas de advertencia oportunas”, dijo Monreal sobre el desempeño del partido gobernante Morena en las elecciones. Morena perdió terreno en el Congreso y en la Ciudad de México, pero obtuvo 11 gubernatura de las 15 que estuvieron en juego.

El líder del Senado también declaró que está trabajando en un paquete de recuperación económica para ayudar a las pequeñas y medianas empresas.