Seat salió en 2015 de los números rojos, con un beneficio neto de 6 millones de euros (unos 6.65 millones de dólares) tras impuestos, después de varios años de pérdidas, según anunció hoy el presidente del fabricante español de automóviles, Luca de Meo.

"Es una gran noticia", manifestó el CEO de la filial del grupo alemán Volkswagen en la fábrica de Martorell, en Barcelona.

La cifra de negocios alcanzó los 8,332 millones de euros, un 11.1 por ciento más.

El último año en el que Seat había registrado beneficios fue 2008. En 2014, las pérdidas ascendieron a 66 millones de euros.

Detrás del regreso a la zona de beneficios está el aumento en las ventas en sus mercados, sobre todo en Alemania, el principal, con 90,000 unidades vendidas. El modelo León ha superado al Ibiza como el más vendido.

"Seat ha roto la barrera de las 400,000 matriculaciones en el año por primera vez desde el comienzo de la crisis económica. Ya estamos al nivel de hace ocho años", dijo De Meo, al frente del fabricante español desde noviembre.

El año que viene, Seat fabricará en la planta de Martorell un nuevo todocamino, hermano pequeño del Ateca, que se ha producido en la República Checa y que saldrá al mercado en junio, según anunció hoy la empresa.