Las empresas automotrices que tienen actividad productiva en Estados Unidos y las compañías proveedoras se unieron para lanzar una campaña en favor de la permanencia del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Las principales cúpulas de la industria automotriz en la Unión Americana —la Asociación de Fabricantes de Motores y Equipos y la Asociación Internacional Estadunidense de Concesionarios de Automóviles— promueven la coalición Driving American Jobs.

Esta agrupación, conformada por empresas como General Motors, Toyota, Volks-
wagen, Ford y Hyundai, pretende difundir las ventajas que tiene el TLCAN para la economía de los estadunidenses, entre las que destaca la generación de empleo, gracias a las fortalezas que impulsa el intercambio comercial, porque con acceso libre a otros mercados y cadenas de suministro integradas en una región se abren puestos de trabajo de manera inherente.

El principal objetivo que persiguen las firmas que cerraron filas en favor de esta campaña es hacer ver al presidente de ese país, Donald Trump, que su idea de salir del tratado puede estancar el dinamismo económico de la industria, situación contraria a su discurso oficial, en el que desde que era candidato sostiene una posición proteccionista.

Dichas asociaciones difundieron un video en sus páginas de internet oficiales en las que indican que “necesitamos que les digan a sus funcionarios electos que uno no cambia las reglas en medio del juego. Con el TLCAN estamos ganando”.

Refieren que gracias a éste, el comercio entre los tres países implica un valor anual por mil 200 millones de dólares, lo que deriva en millones de empleos en la región, los cuales están en riesgo si se pone fin al acuerdo que entró en vigor en 1994.