‘Se nos adelantó Jehudiel’; lo esperan mañana para despedirlo

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‘Se nos adelantó Jehudiel’; lo esperan mañana para despedirlo

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Amigos y familiares recuerdan al joven empresario fallecido en Cuba

Sus seres más queridos ya lo recuerdan como una persona que siempre vio la vida de una manera alegre, capaz de hacer reír a cualquiera con sus comentarios. Jehudiel Valdés Barba falleció lejos de su natal Arteaga, pero sus familiares y amigos lo esperan este lunes para darle el último adiós.

Todos lo conocían como el “Gordo”; alegre, risueño, bromista, un empresario que incursionó en el ramo de la construcción y de la impermeabilización, pero que consolidó su éxito por medio de una cadena de pizzas y otros negocios del ramo restaurantero.

Su amigo y socio, Pablo Abugarade, define a Jehudiel como un “peladazo” que tenía más amigos que nadie, pero que lo más importante siempre fue su familia, sus padres y ahora sus hermanos.

“Fue uno de mis mejores amigos, socio, consejero, en todo momento ayudó y apoyó a mucha gente. Lo que más amaba sin duda era la familia por sobre todas las cosas, porque fue padre y hermano a la vez, siempre sincero, siempre positivo y cuidando de toda la gente que lo rodeaba”, cuenta Abugarade.

Pablo también recuerda que Jehudiel tenía el talento especial para recordar fechas, anécdotas y direcciones con exactitud.

“Lo que él se proponía hacer lo hacía. Que si quería viajar, lo hacía, hacer negocios, nada lo detenía, no tuvo ningún límite”, cuenta su amigo Julio Castellanos.

Pese a su amor por Arteaga y por Coahuila, amaba viajar, como lo hizo la última vez a Cuba para festejar el Grito de Independencia con sus amigos.

“Cuando naciste, tu llorabas y todos sonreían, viviste tu vida de tal manera que hoy todos te lloramos y tu sonríes”, escribió Ana Gabriela Moeller, su prima. 

Un hombre con brillo propio, que siempre invitaba a sus amigos a Arteaga a la huerta El Nogal, como lo recuerdan quienes estuvieron con él en sus años de estudiante en el Colegio Americano. Todo un personaje que daba sazón a la vida, como señalan los cientos de comentarios compartidos a través de redes sociales.

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“Tenía una facilidad increíble para hacer amigos. En nuestra juventud, en secundaria o en prepa, los grupos de las escuelas, que del Zaragoza, que del Cumbres, Alpes, de todos, él hizo amistades con todos, de todo tipo. Estuvo en el Colegio Americano pero se juntaba con medio mundo de cualquier escuela, hizo muchos grupos de amistades”, cuenta Julio, amigo cercano de Jehudiel.

Hace algunos años fallecieron sus padres don Elizandro Valdés Valdés y María Romilia Barba y fue él quien fungió como la figura paterna y cargó con la responsabilidad de sus hermanos Josué y Romy. Su alegría y desparpajo siempre estuvieron íntimamente ligadas a su responsabilidad con los suyos y con su trabajo.

Lo catalogan como un amigo fiel, que siempre te invitaba a su casa, que te llamaba el día de tu cumpleaños para felicitarte. Uno de sus amigos más cercanos apunta que aunque aparentaba ser una persona dura, siempre estuvo para escuchar a todos sus amigos.

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Jehudiel adoraba los deportes. Lo mismo le gustaba el futbol, tanto que viajó hasta Brasil para seguir los partidos de la selección mexicana en el Mundial del 2014, como también disfrutaba de ir a la Plaza de Toros en Querétaro o de disfrutar de un partido de futbol americano de su equipo favorito, los Texanos de Houston.

También le gustaba la charrería y de vez en cuando agarraba la guitarra para amenizar fiestas, reuniones y ratos con sus seres más queridos. Las canciones de mariachi eran de su predilección, lo de menos su talento.

Aunque amaba su terruño, le encantaba salir de viaje. Sus perfiles de redes sociales son un recorrido completo de sus visitas a Cancún, a Guanajuato, a Querétaro, a Brasil, a Panamá y a cuanto lugar se le atravesaba. 

Su último periplo lo hizo a Cuba, a donde acompañó a su amigo Eduardo Martínez y Morales para pasar las fiestas patrias allá, cuando repentinamente le llegó la muerte debido a un paro respiratorio, según ha trascendido en diferentes versiones.

“Gordo, te me fuiste y no entiendo qué pasó, tenía mucho tiempo de no sentir tanta tristeza y de no llorar. En ti encontramos muchísimos a un gran gran amigo y un gran ser humano. Gordo, chingos de gracias por abrirme las puertas de tu casa cuando venía de Monterrey los fines de semana. Gracias por tu buen humor, tus ocurrencias y por tu amistad”, le escribió otra de sus amistades.

De acuerdo con amigos cercanos a Jehudiel Valdés, sus restos llegarán a Saltillo este lunes una vez que se concluyan los trámites migratorios, para que el próximo martes inicie la velación rodeado de todas las personas que pasaron por su vida. 

Amigos y familiares han expresado sus condolencias a través de las redes sociales: