CDMX.- Los Seahawks se encontraron con un partido vital ante Green Bay, pero hicieron valer su localía y salir con el triunfo 27-24 pese a la gran actuación de Aaron Rodgers.

El partido comenzó muy mal para Seattle, pues apenas en su primera serie ofensiva, perdieron el balón y le regalaron siete puntos a los Packers y lejos de responder con un touchdown apenas pudieron sumar puntos gracias a un gol de campo.

Pocos se imaginarían que la jugada clave se viviría desde el primer cuarto, con un gol de campo fallado por Mason Crosby que hubiera puesto a Green Bay 10-0 en lugar de 7-3; sin embargo, los Packers generaron otra anotación para aumentar su ventaja 11 puntos.

Seahawks no bajó los brazos, ordenó defensiva y ofensiva y en un abrir y cerrar de ojos le dieron la vuelta al marcador (17-14), pero Packers no tardó en devolver el golpe e irse con la ventaja 21-17.

Para la segunda mitad del partido, las defensivas dominaron en el tercer cuarto, donde no se hicieron daño. Un gol de campo de Seattle rompió el cero que se vivió tras el descanso y se acercó 21-20, situación que de inmediato respondió Green Bay con la misma moneda.

Pero Russell Wilson hizo una ofensiva espectacular tras recibir los tres puntos y comandó a su equipo hasta zona de Touchdown, lo que le devolvía la ventaja a su equipo.

Green Bay obligado a responder, decidió mal una cuarta oportunidad y dos yardas por avanzar; despejaron y los Seahawks pagaron el regalo sellando el triunfo 27-24.

La semana 11 de la NFL continuará este domingo y el lunes, con el enfrentamiento entre los Chiefs y Rams desde Los Angeles Colisseum.