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Se dicen traicionados por AMLO pueblos originarios que se oponen a Santa Lucía
Tecámac, Méx. Tras la revocación de la suspensión definitiva que mantenía detenida la construcción del Nuevo Aeropuerto Felipe Ángeles en la Base Aérea de Santa Lucía; el Frente de Pueblos Originarios en Defensa del Agua (FPODA), opositor a la terminal aérea, anunció que romperá el diálogo que sostenía con el gobierno de la República porque considera que fueron traicionados.
Ricardo Ovando Ramírez, dirigente del FPODA, que integra varias comunidades de Tecámac y Zumpango, aledaños a Santa Lucía; afirmó que ante la resolución aumentarán sus movilizaciones contra la terminal aérea por el impacto negativo que ocasionará el proyecto en toda esa región, sobre todo el colapso hídrico que provocará por la sobreexplotación del acuífero Cuautitlán-Pachuca.
“Consideramos una traición lo que hace el gobierno porque teníamos mesas de diálogo y ahora resulta que en cuanto se caigan los amparos ahora van a iniciar luego luego las obras, cuando nosotros habíamos venido dialogando en la Secretaría de Gobernación, en la que se nos había abierto la perspectiva de que existía la posibilidad de hacer la consulta previa, como lo marca el Convenio 169, o sea antes de iniciar la obra, y ahora resulta que nos dieron atole con el dedo.
“El capricho presidencial es seguir adelante con la construcción del aeropuerto, independientemente de las mesas de trabajo. Sentimos que hay una traición, se nos habla de que hay voluntad de escuchar la oposición de los pueblos, se nos invita a elaborar un plan hídrico de restauración de la cuenca y después sale la declaración del presidente de que al día siguiente van con la maquinaria a dar el banderazo y a construir su megaproyecto, entonces eso lo vemos como una traición del gobierno federal, lo de las mesas de trabajo”, dijo.
Ricardo Ovando sostuvo que la Federación solo simula escucharlos, pero la decisión de construir la terminal aérea ya está tomada.
Consideró que existe una doble moral de la federación porque mientras convocan a los habitantes a mesas de trabajo para que se realice un plan de restauración hídrica, se toma una “decisión necia y arbitraria” de construir a toda costa el aeropuerto.
Opinó que los argumentos que presentó la Sedena para que fuera revocada la suspensión definitiva para la edificación del aeropuerto son incongruentes porque al estar en operación constante, con el despegue y aterrizaje de aeronaves, obstruirá las propias maniobras militares de seguridad nacional.
“A nosotros nos queda claro que el gobierno federal presionó a los jueces para que aceptaran esta circunstancia”, apuntó.