Hace cuatro años, el mundo del futbol quedó sorprendido tras el accidente aéreo del Chapecoense, equipo brasileño que vivía su sueño en la Copa Sudamericana.

El 28 de noviembre del 2016, a las 10:15 de la noche, el vuelo chárter 2933 de LaMia, que partió desde el aeropuerto Viru Viru (Bolivia) con destino a Medellín chocó en un cerro cerca de la capital antioqueña.

El avión tenía 68 pasajeros, la mayoría eran parte del plantel de Chapecoense que viajaba para medirse ante el Atlético Nacional en la final de la Copa Sudamericana.

Solo seis personas sobrevivieron a la tragedia que enlutó a Brasil, a Colombia y al mundo del fútbol, una tristeza que no se supera, a pesar del tiempo.

Las investigaciones, en medio del duelo, no se hicieron esperar y las conclusiones fueron claras: el avión se precipitó a tierra debido a la falta de combustible, en un error humano del que hoy el mundo aún habla.

Hoy, el mundo del fútbol recuerda la tragedia que quedará marcada en la historia.