ATLANTA.- La estrella de los Braves, Ronald Acuña Jr., ha trabajado duro para llegar a la estratosfera de las Grandes Ligas. Un día después de sufrir un desgarro del ligamento cruzado anterior en la rodilla derecha, que terminó su temporada, Acuña Jr. prometió trabajar más duro que nunca para permanecer allí.

“Lo único que puedo decir es que obviamente voy a poner el máximo esfuerzo para volver más fuerte que nunca”, dijo Acuña Jr. “Si antes estaba dando el 500 por ciento, estoy a punto de empezar a dar el mil por ciento”.

Acuña Jr. sufrió la lesión durante la victoria de Atlanta por 5-4 sobre los Marlins cuando aterrizó torpemente en la zona de advertencia mientras perseguía un elevado golpeado por Jazz Chisholm Jr. de Miami. Un Acuña Jr. en agonía se agarró la rodilla mientras Chisholm rodeaba las bases para completar un jonrón dentro del terreno.

El juego se retrasó más de 10 minutos después de que Acuña inicialmente intentó salir del campo pero no pudo hacerlo por sus propios medios. Mientras lo llevaban en un carro, las cámaras captaron a un Acuña emocionado llorando después de lo que resultó ser una lesión que terminó con la temporada, aunque dice que inicialmente no sabía que ese era el caso.

“Sabía que algo andaba mal”, dijo Acuña Jr. “Supongo que no entendí la gravedad del problema, hasta que el médico me lo contó más tarde. No puedo hacer nada al respecto ahora. No puedo controlar cosas que no puedo controlar”.

El sábado por la noche, los Braves anunciaron a través de las redes sociales que Acuña Jr. había sufrido un desgarro completo de su ligamento cruzado anterior y se sometería a una cirugía. Se espera que Acuña Jr. se pierda de 9 a 10 meses, lo que lo pondría en peligro de perderse el inicio de la temporada 2022.

Sin importar el tiempo que tome, Acuña Jr. promete volver tan bien como era cuando se lesionó.

“Creo que soy una persona paciente y creo que eso va a funcionar a mi favor”, dijo Acuña Jr. “Continúe trabajando duro, confíe en el proceso de rehabilitación. Simplemente continúe trabajando duro. Obtienes lo que pones”.

Acuña Jr. no discutió un cronograma con respecto a su eventual regreso, y dijo que su cirugía aún no está programada. Por ahora, se está preparando para ir, como estaba planeado, a Colorado para el Juego de Estrellas, donde habría comenzado en los jardines de la Liga Nacional.

“(Ser seleccionado) significa mucho para mí”, dijo Acuña Jr. “En ese mismo sentido, esos aficionados que salieron y votaron por mí, se lo merecen tanto como yo. No estaría aquí sin ellos”.

Antes de su lesión, Acuña Jr. estaba preparando otra temporada estelar que lo posicionó para una carrera en busca de su primer premio MVP. Lidera a los Braves en promedio de bateo (.283), jonrones (24) y bases robadas esta temporada (17), y lidera a todos los jugadores de Grandes Ligas con 72 carreras anotadas.

Acuña Jr. es solo el quinto jugador en compilar al menos 100 jonrones y 75 bases robadas a los 23 años o menos, uniéndose a Mike Trout, Andruw Jones, Alex Rodríguez y Ken Griffey Jr.

“Este tipo es posiblemente el mejor jugador del juego en este momento”, dijo el mánager de los Braves, Brian Snitker. “Va a ser difícil reemplazarlo. Alguien va a tener una oportunidad, ya sea alguien en este camerino o fuera, ¿quién sabe? Eso es lo que hacs en nuestro negocio, simplemente sigues, sigues jugando”.

La victoria de Atlanta el sábado igualó el récord de los Braves en la temporada con 44-44. Los tres veces campeones defensores del Este de la Liga Nacional han luchado contra las lesiones y la inconsistencia durante toda la campaña. Su juego en Miami el domingo representó su séptima oportunidad esta temporada de superar los .500. Atlanta ha perdido sus seis juegos anteriores en esa situación. Aunque los objetivos de la temporada de los Braves sin Acuña serán más difíciles de alcanzar, él, al menos, cree en sus compañeros de equipo.