La compañía española de teatro Ron Lalá presentó hoy en el Festival Internacional Cervantino (FIC) de Guanajuato su producción "Cervantina", que con un humor "disparatado y muy loco" trata de hacer que los espectadores se cuestionen aquello que les rodea.

"A nosotros nos ha fascinado siempre un humor profundo, no ver el humor como la superficie de las cosas", aseguró en rueda de prensa el actor Álvaro Tato al hablar de la obra, realizada en coproducción con la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) de España.

El espectáculo, que llevarán al público los próximos 5 y 6 de octubre, recoge pasajes de diferentes textos del llamado "príncipe de los ingenios", entre ellos sus entremeses, las "Novelas ejemplares" o el "Viaje del Parnaso".

"Cervantina" es un "menjunje" de música, teatro, humor y poesía en la que todos estos ámbitos se ponen al servicio de toda la obra de Cervantes, a excepción de don Quijote, al que ya dedicaron una producción anterior por encargo de la CNTC.

Para la compañía, Cervantes es "el gran humanista del humor", y al igual que otros "grandes genios" como Aristófanes, Shakespeare, Charles Chaplin o Ernst Lubitsch, consiguió con la comedia "profundizar en los misterios del ser humano", opinó Tato.

Asimismo, añadió su compañero Miguel Magdalena, el autor tuvo ideas que podrían considerarse revolucionarias, incluso para su época, y se preocupó por "esa España que construyen los olvidados", como eran las mujeres o los gitanos.

Los integrantes de la compañía, afanados en trasmitir el "virus de la Cervantina" -que sufren aquellos que cuestionan lo que les rodea- interpretaron un fragmento de una de las canciones de la función, con la que de una manera cómica reflejan la ambición y cinismo que hubo detrás de la llegada de los españoles a América.

Es un ejemplo de cómo emplear el humor para hablar de "cosas importantes" y, en este caso, para cuestionar "nuestro muy discutible pasado como conquistadores", afirmó el actor Juan Cañas.

En cuanto a la música, la agrupación asegura que este espectáculo es "más acústico" que el que hicieron sobre don Quijote -que tomó un cierto tono electrónico-, y que en él se combinan los ritmos flamencos con los latinoamericanos.

El director de Ron Lalá, Yayo Cáceres, señaló que trabajar con la CNTC asegura la "tranquilidad de poder trabajar con todos los medios, para tener un espectáculo de la mejor factura posible", y además les da el "privilegio" de salir de gira por el mundo con la obra de Cervantes.

Consideró que España, a pesar de los recortes de los últimos años, "tiene una política de Estado respecto a la cultura muy importante", en forma de ayudas y subsidios, que "no se debería perder jamás".

No obstante, en el país, al igual que está sucediendo en otros rincones, "cada vez es más difícil hacer humor".

"La corrección política nos está matando", aseveró el director, quien defendió que el humor "no debería tener límites”.