Cuatro Ciénegas, Coahuila.- La Comisión Nacional de Áreas Protegidas (Conanp) autorizó al señor Antonio Arredondo Galindo la prestación de servicios turísticos y recreativos en la propiedad conocida como Río Mezquites, por lo que la empresa Desarrollo Turístico San Marcos no podrá operar el paraje natural en la temporada vacacional de Semana Santa.

La familia Arredondo presentó los permisos emitidos por las autoridades federales para trabajar en dicho lugar, el cual recibe miles de visitantes año con año y deja una importante derrama económica en el Pueblo Mágico de Cuatro Ciénegas por ser una de las principales atracciones turísticas que cuenta con flora y fauna endémica.

Los representantes de Desarrollo Turístico San Marcos presuntamente invadieron el lugar desde el mes de diciembre y se ostentan con nuevos propietarios, pero Antonio Arredondo indicó que además de tener los permisos para operar, cuentan con las escrituras legítimas del Río Mezquites así que la empresa no podrá reabrir el lugar para Semana Santa.

Al intentar despojarlos de la propiedad, la familia Arredondo de Cuatro Ciénegas interpuso denuncias penales y ante la Secretaría del Medio Ambiente por lo que esperan que en breve resuelvan el caso.

"Ellos dicen que harán inversiones muy fuertes para mejorar el sitio turístico, pero según el documento del Registro Público del Comercio sólo cuentan con 50 mil pesos de capital; cómo una empresa con capital de 50 mil pesos compró un terreno así y hará inversiones millonarias, están cayendo en una contradicción y por eso nos gustaría saber quién está detrás", comentó Antonio Arredondo.

Asimismo dijo que el presidente de la Oficina de Convenciones y Visitantes (OCV), Luis Gilberto González Arocha, es cómplice del delito al estar de acuerdo con la invasión del sitio.

"Claramente está en complicidad para que nos quitaran la propiedad porque Luis Gilberto está fungiendo como vocero de la empresa pese a que él nos conoce desde siempre, conoció a mi padre. Lo que me pregunto es por qué no dan la cara y por qué no muestran quién les vendió, los estafaron porque nosotros somos los únicos dueños y siempre hemos operado el lugar, mi bisabuelo lo hacía desde el siglo pasado", agregó.