RAMOS ARIZPE.- El Gobernador Rubén Moreira Valdez convocó a una Sesión Extraordinaria del Grupo de Coordinación Operativa (GCO) con el fin de analizar los protocolos de seguridad en los Ceresos del estado.

Lo anterior, como respuesta a los hechos ocurridos el jueves en el Penal de Topo Chico, donde varios reos murieron.
El Mandatario Estatal dijo confiar en las autoridades del Estado vecino, y anunció que se están llevando a cabo acciones para mantener seguros a los coahuilenses.

“Hay un helicóptero sobrevolando la ciudad, retenes de control en carretera, así como retenes de control en algunas partes de la ciudad”, dijo.

Con la presencia de los Titulares de las diversas dependencias de seguridad, se  revisaron donde los 14 protocolos que se llevan a cabo en Ceresos  entidad; entre los que destacan el protocolo en caso de fuga, o cómo actuar en caso de motín por mencionar solo algunos.

Rubén Moreira informó que desde el jueves pasado se llevaron a cabo diferentes inspecciones en todos los Centros de Readaptación Social de Coahuila.

Esta acción, subrayó el Mandatario, será permanente hasta que pase la emergencia en Nuevo León.

“No tenemos ni autogobierno, ni hacinamiento, no podemos bajar la guardia, nosotros vamos a seguir atentos”, dijo.
Al tiempo, indicó que para retirar malas prácticas, los celadores deben percibir mejores sueldos y actualmente ganan por lo menos 12 mil pesos libres, con prestaciones, incluyendo la prestación que tienen del Infonvit.

En ese contexto, el Titular del Ejecutivo manifestó que algunos casos hubo que despresurizar Ceresos, mientras que en otros casos se reforzaron estos centros, mientras que con apoyo de las autoridades norteamericanas se están certificando algunos de los centros de reclusión.

Por último, durante la reunión del Grupo de Coordinación Operativa, se dieron a conocer las estadísticas de la incidencia delictiva, la cual mantiene su tendencia a la baja.