El rescate de los 63 cuerpos que quedaron atrapados tras la explosión en la mina de Pasta de Conchos en 2006 es un llamado de justicia, dijo Luisa María Alcalde, secretaria del Trabajo federal.

“Nos reunimos con las familias, hemos estado en contacto constante con los familiares, incluso el día de ayer [jueves] tuvieron una reunión con el Servicio Geológico que les explicó exactamente en qué consisten estos estudios que ya se realizan ahí, y las familias demandan justicia. Nosotros estamos convencidos que todas las acciones que hagamos para el rescate de los mineros que aún permanecen ahí, pues es un llamado de justicia”, dijo la funcionaria.

Este jueves inició la primera etapa con más de 100 trabajadores para el rescate, coordinada por el Servicio Geológico Mexicano que está realizando estudios y análisis para determinar los métodos exactos que deben seguir.

La Secretaría del Trabajo estimó que la primera etapa concluya a principios de febrero, para después iniciar la segunda etapa del rescate.

“El Servicio Geológico Mexicano inició con todos los estudios que se requieren (...) ya está hoy trabajando ahí la mina y en ese territorio para estar en condiciones de saber específicamente cuál es la metodología que vamos a seguir”, indicó Alcalde, acotando que tras ello se definirá el método para esta labor.

EL DATO

La Secretaría del Trabajo junto a expertos en geología revisan las condiciones de la mina para así conocer cómo podrían incursionar en la mina y rescatar los restos de los 63 trabajadores.