El tramo de la calle Felipe Berriozábal, que bordea el costado oriente del parque Óscar Flores Tapia, “La Maquinita”, se encuentra en malas condiciones; está repleta de baches e incluso siendo “devorada” por el arroyo que cruza por ahí, por lo que automovilistas y peatones solicitan la intervención de las autoridades para rehabilitar esta vialidad. 

Al hacer un recorrido desde la calle Ramos Arizpe y hasta la calle Carlos Pacheco, se observó una buena cantidad de baches, a tal grado que son casi imposibles de esquivar por parte de los conductores. 

Lo más peligroso es que el cauce que cruza por esa zona poco a poco ha carcomido la vialidad en mención y generó un boquete que con el paso del tiempo se hace más grande y riesgoso, en este punto continúa creciendo la maleza y ha sido aprovechado como basurero donde ya hay desde ropa y hasta carcasas de televisores viejos.  

Debido a los baches y a los daños que generó el arroyo, los automovilistas deben maniobrar e incluso invadir el carril de circulación contrario, situación que pudiera generar un accidente, de ahí la importancia de rehabilitar esta vía. 

Otro de los puntos negativos de esta calle es la falta de alumbrado en este tramo, situación que genera inseguridad, por lo que aquellas personas que acuden al parque a practicar algún deporte prefieren hacerlo por las calles Ramos Arizpe o Pedro Ampudia.

La calle Felipe Berriozábal sirve como una vialidad alterna para aquellos que buscan ingresar o salir de sectores como Guayulera, Chamizal o La Minita, sin embargo en la práctica resulta poco viable debido a las condiciones en las que está.