El cartel de toros de una corrida acontecida en Saltillo en 1891, se encuentra y forma parte del amplio acervo del Archivo Municipal de Saltillo. El origen no es claro, es probable que alguien lo haya donado tiempo atrás. Sin duda el cartel es muy interesante, pero contiene datos que nos ponen a pensar si es genuino o no, veamos por qué.

Un documento escrito a mano o por algún otro medio mecánico, recoge el relato de uno o varios hechos de personas. Con el paso del tiempo los documentos cobran importancia, ya que formarán parte de la historia.

Los escritos se soportan mediante la impresión en algún tipo de papel o en forma magnética. El resguardo de información se puede hacer de manera física o en dispositivos digitales. Es importante decir que los soportes digitales no garantizan su perpetuidad, vaya, no son del todo seguros, después de cierto tiempo se recomienda cambiar a otros medios de almacenamiento, por las fallas que pudieran presentar debido a su obsolescencia.

ANÁLISIS DEL CARTEL

El cartel muestra el domingo 25 de mayo de 1891, al revisar el calendario perpetuo, ese día 25, de ese mes y año, cayó en lunes.

La Plaza de Toros de Guadalupe de Saltillo se empezó a construir en 1897, fue inaugurada el 15 de noviembre de 1898.

El cartel incluye la presentación como matador de alternativa a José Marrero apodado “Cheché”. Este torero de origen cubano llegó a México en 1890, durante 2 años sirvió en la cuadrilla del torero de grandes bigotes llamado Ponciano Díaz. El mismo Ponciano le otorgó la alternativa el 31 de julio de 1892. Marrero no fue sino hasta 1894 cuando se presentó como matador. En 1895 se casó con María Aguirre “La Charrita Mexicana”, anunciada también en el cartel, siempre actuaron juntos en plazas mexicanas. Marrero aún no era matador, no pudo presentarse como torero con alternativa.

LA HISTORIA DE LA CHARRITA MEXICANA

María Aguirre trabajó como amazona en un circo, ahí conoció a Timoteo Rodríguez. En 1885 contrajeron matrimonio, años más tarde la pareja dejó el circo para dedicarse de lleno al toreo, Timoteo como torero y María para hacer todo tipo de suertes a caballo. En 1895 en la plaza de toros de Durango, Timoteo Rodriguez murió a causa de una cornada que le dio un toro de la ganadería de Guatimapé. La viuda se casó entonces con José Marrero “Cheché”, pero fue hasta 1896 cuando trabajaron juntos. Muy difícil fue, que hayan hecho mancuerna en Saltillo.

El otro matador de alternativa, “Corcito”, se debe referir a Manuel Corzo Andaluz “Corcito”, este torero español llegó a México, donde recibió la alternativa en el año de 1910, este espada sí actuó en la plaza de Guadalupe, pero en 1915.

La ganadería de El Cayeno se formó en el estado de San Luís Potosí el año de 1889, después de agregar sementales y vacas de diferentes ganaderías en 1890 cambió de nombre al de Gunamé. Es difícil que la ganadería lograra fama en poco más de un año.

El libro, “El Cartel Taurino: Quites Entre Sol y Sombra”, de Begoña Torres González, editado en 1998 por el Ministerio de Educación y Cultura de España, muestra en la página 162 la misma litografía base, para una corrida celebrada en Valencia, España en 1917.

LA MENTIRA DURA MIENTRAS LA VERDAD NO LLEGA

Se puede pensar que las falsificaciones no deben formar parte de un archivo histórico, y que no hay cabida para documentos apócrifos, pero esto no es cierto. Este ardid no es exclusivo de la era digital, desde siempre y en todo acervo existen documentos falsos, por ello los archivos tienen un apartado especial para ellos.

Los documentos ilusorios son tan importantes como los genuinos, por el hecho de haber permanecido como válidos antes de ser desmentidos. Es importante que se conserven como documentos históricos, a veces las cosas reales empezaron con una o más mentiras.

Las consecuencias no parecieran ser tan graves, la picaresca intención de hacer el cartel fue para hacerlo parecer una antigüedad. Por las inconsistencias expuestas, el documento pasa a ser un bonito souvenir sin ningún valor histórico.

Un documento es una fuente finita de conocimiento. Las fuentes originales o primarias son herramientas indispensables para el desarrollo en la labor de investigadores. Gracias a instituciones oficiales y privadas, millones de documentos son estudiados, clasificados, restaurados y archivados, ya sea para el estudio e interpretación de la historia u otros fines.

Los archivos resguardan tesoros documentales, son puertas de acceso al pasado para conocerlo, entender nuestro presente y así vislumbrar la construcción del futuro, por ello visite el Archivo Municipal de Saltillo.