El presidente de la Cámara de Representantes de EU, el republicano Paul Ryan, subrayó hoy como un día "histórico" la presentación de la propuesta de reforma fiscal de su partido, y afirmó que "a la típica familia estadounidense" de cuatro miembros le ahorrará un total de 1,182 dólares al año.

"Es un día histórico. Vamos a hacer las cosas tan simples que se podrá realizar la declaración de impuestos en un formulario del tamaño de una postal", subrayó Ryan, en una rueda de prensa en el Capitolio.

Ryan aseguró que con esta propuesta, que incluye notables recortes de impuestos para empresas y trabajadores, a la "típica familia estadounidense de cuatro le permitirá ahorrar 1,182 dólares al año”.

La cifra es inferior a la previamente pronosticada por la Casa Blanca, que había situado el ahorro en 4,000 dólares anuales.

Por su parte, Kevin Brady, presidente del Comité de Medios y Arbitrios de la Cámara y autor de la propuesta, sostuvo que la idea es ofrecer "alivio" para los trabajadores y empleadores.

"Es tu dinero. Te lo ganaste. Mereces guardarlo", recalcó Brady ante los periodistas.

La propuesta, ya delineada por la Casa Blanca en septiembre, incluye una reducción de la tasa impositiva a las empresas desde el 35 % actual al 20 %.

Asimismo, se planea simplificar los tramos de impuestos de la renta individual, al pasar de los siete actuales a cuatro: del 12 %, del 25 %, del 35 % y del 39.6 %.

Aunque los republicanos están de acuerdo en la bajada de impuestos, el principal escollo es que el plan del presidente de EU, Donald Trump, implica un aumento del déficit presupuestario de 1.5 billones de dólares en la próxima década, y muchos de ellos se oponen a cualquier incremento en el endeudamiento federal.

La propuesta es la principal apuesta legislativa del mandatario para su primer año en el cargo.

Este martes, Trump dijo que quiere que su plan de reforma tributaria esté listo para poder firmarlo en Navidad o incluso antes, en un acto del que afirmó que será "el mayor evento fiscal en la historia" del país.

El objetivo del presidente es que la Cámara Baja apruebe el proyecto de ley de reforma fiscal a fines de noviembre, en torno a la festividad de Acción de Gracias, para que el Senado tenga aproximadamente un mes para hacer lo mismo antes de Navidad.