Al recorrer el Hospital Rural número 69, el Presidente Andrés Manuel López Obrador se congratuló de que ya se eliminó la reforma educativa.

“Ya se terminó con ese estorbo que era la llamada reforma educativa”, expresó durante el diálogo que sostuvo con la comunidad médica del hospital de Zacapoaxtla, Puebla.

El mandatario confió en que con ésta los maestros seguirán portándose bien y no faltarán a clases, lo cual no es tan grave como si faltan los médicos en un hospital rural, pues una persona que sufre un infarto se muere por no llegar a un hospital capitalino, mientras que un niño sólo se queda en casa con la mamá o la abuelita.

En materia educativa, el mandatario también reiteró que en la entidad arrancó el programa de La Escuela es Nuestra, con el que se entregarán apoyos directos a padres de familia y maestros para que mejoren la infraestructura de las aulas.

Resaltó que como parte de la cuarta transformación se está terminando con lujos, como el uso del avión presidencial, el cual ofrecerá a su homólogo de Estados Unidos, Donald Trump, en la próxima conversación telefónica que tengan.

“¡Anímese! Se lo vendemos, ya está allá en California, está en venta”.

Resaltó que tampoco utiliza helicópteros para visitar los pueblos, por lo que pudo constatar que el camino de Zacatlán-Zacapoaxtla sigue en las mismas condiciones de baches en la que lo vio hace 3 años, por lo que es un trabajo “tremendo” el que se tiene que hacer ahí.

Como parte de los cambios y ante la discusión pendiente de la Ley de Austeridad Republicana, indicó que aquel que no quiera ajustarse a estos términos puede irse al sector privado, pues el gobierno no es para servirse sino para servir al pueblo.