Familiares y activistas de la Región Carbonífera realizaron una misa en memoria de los 12 mineros que perdieron la vida en la mina “La Morita” hace 18 años, caso del que hasta hoy tampoco ha tenido justicia.

Además de recordar a las 12 víctimas que dejaron en orfandad a 19 hijos desde el 29 de septiembre de 2001, fue recordado que las familias no recibieron nunca indemnizaciones por los hechos, y en los casos que había de pensionados, los montos mensuales eran menores a los 2 mil pesos.

El memorial realizado en el ejido Santa María, reunió las fotos de algunos de los fallecidos, entre los que estaban Abraham Llamas Portales, Alejandro Briones González, Antonio Ledezma Quiroz, Juan Carlos Mendoza Briones, Florentino Briones Muñiz, Jesús Enrique Morín Jaso, Jorge Luis Ayala Alvarado, José Luis Castro Guzmán, Juan Carlos Díaz Gámez, Matías Ibarra Pruneda, Martín Portales Gallegos y Ramiro Alvarado Sánchez.

En torno al día, el semanario Proceso revivió la historia de Mario Alberto, un menor sobreviviente de 15 años, que varios años de esta tragedia narró que al igual que otros, nunca fue atendido pues no estaba dado de alta en el Seguro Social, y hasta hoy padece de problemas con el oído, y tampoco fue indemnizado por el daño.

En la información, el periodista detalla que por ejemplo en los casos de Abraham Llamas Portales, José Luis Castro Guzmán y Juan Carlos Díaz Gámez, tampoco había un alta ante el Instituto Mexicano del Seguro Social, y que en el caso de Enrique Morín Jasso, otro de los fallecidos, su madre solo fue acreedora de una pensión de seis pesos.

“La suma de todas esas negligencias debió ser identificada por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, cuyas áreas de inspección debían documentar las condiciones de la operación minera de La Morita. Así, la negligencia empresarial y la omisión gubernamental, resultó en la muerte de los 12 mineros y las decadencias físicas que experimenta hasta hoy Mario Alberto”, dice el reportaje que revelaron en torno al memorial.

De acuerdo con la investigación, el lote minero todavía es operado por la empresa Materiales Industrializados, y es parte del conglomerado de la familia Guadiana Tijerina, y en la existencia del contrato se ubicó que la paga a los trabajadores es de cinco pesos por tonelada, misma que venden a CFE a un costo de mil.

El memorial, fue instalado durante la misa en la iglesia del ejido Santa Marina, y fueron colocadas por los familiares, quienes también recordaron a Felix Schleevoight, ingeniero inglés que también murió dentro de la explosión a causa de la acumulación de gas que había formado un descontrol que ya se conocía existía dentro de la mina.