El pasado lunes el Consejo General del INE resolvió, luego de largos y sesudos cálculos de aritmética parvularia, que sí: los candidatos del PRI y del PAN al Gobierno de Coahuila rebasaron los mentados topes de campaña. Con esta resolución concluye  una primera etapa de pataleo de los partidos políticos opositores al PRI para tratar de que se anulen las elecciones de Gobernador.

De acuerdo con los consejeros del INE, el PRI rebasó el tope de gastos de campaña en un ocho por ciento; y el PAN sobrepasó   el presupuesto para la campaña en un cinco por ciento.

La decisión del INE no dejó contento a nadie, los consejeros del INE son como los árbitros en el futbol: el receptáculo de todas las rechiflas y mentadas; aún no terminaba la sesión del pasado lunes cuando el partido Morena en voz de su representante exigió la salida de todo el Consejo General, salomónica y no impopular propuesta para la que argumentó que al INE le pasó de noche la intervención del Gobierno Federal y de los gobiernos estatales en las elecciones del 4 de junio.

Por su parte, el PRI que dirige el primer tocayo y eminente taxista de la época preUber, Enrique Ochoa Reza, se dejó caer en contra de los consejeros que votaron a favor del dictamen del INE, a quienes acusó de restar certeza jurídica al proceso de fiscalización de los comicios de Coahuila.

Lorenzo Córdova, presidente del INE en abono a la resolución de los tan mentados topes de campaña, dice: “Cada vez las normas son más complicadas y difíciles de entender para muchos”. Y aquí Juan Pueblo se pregunta para qué tantos brincos, si el suelo está tan parejo como socavón de la carretera México-Cuernavaca.

Esta misma semana, la PGR exhibió su lado flaco en la audiencia inicial por lavado de dinero y delincuencia organizada en contra del ex gobernador de Veracruz, Javier Duarte; los fiscales no pudieron, o no quisieron presentar argumentos sólidos en contra del acusado. En ese contexto, Javier Duarte obtuvo la protección de la justicia federal al suspender dos órdenes de aprehensión por abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal, peculado, tráfico de influencias y coacción. Los fiscales de PGR acreditaron solamente 38.5 millones de pesos desviados de la Secretaria de Educación Pública.

En otro menester, el pasado domingo antes de realizarse un concierto en la Catedral de Saltillo, a un músico de Artescénica  le robaron un oboe; a algún plomero local le pareció genial que el tubo ya trajera la pichancha incluida.

A través de las redes sociales, la comunidad artística invita a quien le haya robado el oboe a don Jouri Vodolazski lo regrese; además, habrá una gratificación, aunque sea para quitarnos la vergüenza de robo tan mezquino.

Aunque usted no lo crea, los ladrones entraron a la casa del señor de Santiago de Saltillo y se robaron el oboe. Todavía ayer en distintos medios impresos se publicó un anuncio con la imagen del instrumento musical y el teléfono celular 844 869 22 72.  Si usted sabe dónde está el artefacto, o si conoce al ratero: denúncielo.  

Al mismo número puede reportar más crímenes cometidos por Javier Duarte, a ver si con esos dura más de 15 días en la cárcel, y hasta adelantar su hipótesis de cómo explicar dentro de la física cuántica el caso de los topes de campaña movibles que a todos trae de cabeza. A ver qué caso de conciencia se resuelve primero.