La Fiscalía General del Estado (FGE) reconoció que de 2006 a la fecha fueron enviados a fosas comunes 520 cadáveres en el estado, sin que se les tomara una muestra de ADN para su identificación, pese a que el 70 por ciento tuvo una muerte violenta.

Por ello, la Fiscalía busca analizarlos a través de la Coordinación de Exhumación, para que su perfil genético sea publicado en plataformas nacionales de búsqueda de desaparecidos.

Según los expedientes, el 70 por ciento de los cuerpos reflejan que el motivo de su muerte fue violento, mientras que en el 30 por ciento restante fueron causas naturales, detalló José Ángel Herrera, titular de la Fiscalía de Personas Desaparecidas en el Estado de Coahuila.

Por regiones, el 48 por ciento de los cadáveres se encuentra en fosas comunes de La Laguna, 30 por ciento en el Sureste, y los demás en distintos puntos de la entidad.

Tras seis meses de exhumación de restos, la Fiscalía especializada ha obtenido el ADN de 32 cuerpos, que se exhibirá en redes nacionales de la Procuraduría General de la República (PGR), Servicios Policiales y la Policía Científica, apuntó Herrera, con el fin de que sean identificados y entregados a sus familias.

“Por eso hay un protocolo (…) ubicar todo ese cadáver no identificado y posteriormente llevar a cabo la sepultura en una fosa individual común, porque a fin de cuentas sigue estando sin identificar, para en algún momento subir los perfiles genéticos a las bases nacionales”, explicó.