Todos los seres humanos tenemos la necesidad de relacionarnos unos con otros diariamente, en cada instante. De hecho gran parte de todo lo bueno que la vida puede ser con nosotros tiene mucho que ver con el tipo de relaciones que establezcamos.

Nuestras relaciones con otros son tan importantes que de ellas depende establecernos en un trabajo y conservarlo, de tener éxito en los diferentes equipos de trabajo que compartiremos y hasta de lograr un buen matrimonio y relaciones sanas con nuestros hijos. A continuación te presento estas cinco claves de éxito en las relaciones personales.

1. Sé una persona flexible

Quita de tu mente la frase: “Yo soy así y no puedo cambiar. Si no les gusta, no es mi problema”. Es realmente difícil tener una buena relación con alguien necio o que no tenga la mínima intención de colaborar. Cuando cedemos en algunos puntos de discusiones o trabajos en equipo, los que nos rodean lo reconocen y todo comienza a ser un poco más fácil. La capacidad de adaptación es una de las cualidades más buscadas hoy en día en cualquier empleo. Adaptarse y ser flexible son dos muy buenas opciones para facilitar la comunicación y el entendimiento entre personas.

2. Sé una persona divertida

¿Tiene sentido estar enojado siempre? Las arrugas en el rostro se notan más y más rápido cuando tenemos constantemente el ceño fruncido. Esto merma la confianza y cualquiera se aleja tan pronto como puede, incluyendo esposo e hijos. Es más fácil relajarse, lo cual mejora la salud y el estado de ánimo, mejorando el ambiente general de quienes nos rodean.

Aprende un chiste inocente, una anécdota divertida o siempre ten a mano una experiencia divertida que puedas compartir. Quien puede reírse de sí mismo, nunca se aburrirá. Con una persona simpática y sonriente, siempre es más fácil trabajar, dialogar y convivir. Nunca te faltará alguien con quien platicar, harás amigos por donde quiera que pases.

3. Escucha a los demás

Algo que todos valoramos mucho es encontrar en nuestro camino alguien que nos escuche y nos pueda dedicar unos minutos para expresarle lo que sentimos. Entonces conviértete en esa persona: si alguien platica contigo, sé amable y escúchale, permite que la persona hable, pon atención a lo que dice e interésate sinceramente en su conversación y su persona.

Es curioso, pero existen personas que apenas inicia una conversación, buscan acaparar el tiempo y la plática, son desconsiderados al pensar que sus experiencias y opiniones son lo único de lo que se puede hablar. Evita esto y conviértete en un gran conversador escuchando a otros.

4. Sé servicial y acomedida

Una persona con estas cualidades siempre es bien recibida en cualquier lugar. Ofrecerte a dar un servicio, colaborar con otros, ayudar y llevar las cargas de alguien más, son atributos que todos debiéramos esforzarnos por desarrollar.

Ya sea que estés de visita en algún lugar, o caminando por la calle, siempre podrás encontrar una oportunidad de servir a otros. Cuando ayudamos, olvidamos nuestros propios pesares y la comprensión surge maravillosamente.

5. Sé amable

Saludar al llegar a un lugar, despedirse, pedir las cosas por favor, ofrecer ayuda, sonreír y tener una palabra amable y oportuna… usualmente son esos pequeños actos los hacen la diferencia en la vida de alguien. Por muy viejo o muy joven que sea alguien, rico o pobre, en el puesto o posición que te encuentres, la amabilidad hace la verdadera diferencia entre alguien que posee educación.

Puede que pienses que todo lo que hemos platicado no sea nada nuevo y que ya vivas muchos de estos principios de vida y que, pese a ello, sientes que no tienes los amigos que quisieras o la relación con alguien especial como lo has soñado. Si es así, ¡no te desanimes! ¡Continúa siendo así! Convertirte en la mujer de tus sueños toma tiempo, piensa qué persona quieres llegar a ser y concentra tus esfuerzos. Pronto, muy pronto, los verás hechos realidad.