Monterrey, Nuevo León.- El Gobierno de Nuevo León aseguró que el Penal de Cadereyta recobró el orden, luego de los hechos del lunes, sin embargo el Vocero del Grupo de Coordinación, Aldo Fasci reconoció que sigue la alerta porque puede brotar la violencia en cualquiera de los centros penitenciarios de la entidad.

El funcionario estatal admitió que siempre existe el riesgo latente de un nuevo hecho violento porque los centros penitenciarios de la entidad son de mediana seguridad y falta personal.

“No es algo que nos tenga contentos”, aseveró Fasci Zuazua.

La tarde del lunes una supuesta protesta de los internos terminó en un suceso violento en el que hubo siete personas lesionadas, entre ellas, un policía y un comisario.

El resto de los heridos fueron cinco internos, uno de los cuales presentó un pre infarto.

Fasci Zuazua no descartó que pudieran existir nuevos brotes de violencia e incluso compartió que eso en ocasiones es cíclico.

“Cuando hay un motín en un centro penitenciario, vienen en cadena los otros. Sucede”, aseguró.

Recordó que los tres penales que hay en la entidad: Topo Chico, Apodaca y Cadereyta son de mediana seguridad.

Planteó que la solución sería la construcción del nuevo penal en Mina, sin embargo recordó la falta de recursos.

Por lo pronto, compartió, que se están haciendo adecuaciones en el centro penitenciario del Topo Chico.

A la gente que ha cuestionado al gobierno estatal por la falta de control en los penales respondió que en esos sitios siempre hay descontroles.

Sin embargo destacó que es función de la autoridad volver a poner las cosas en su lugar.

Sobre la situación en el Penal de Cadereyta reiteró que está en orden.

“Es momento a momento, osea este no es un asunto de ya lo arreglamos y cantamos victoria, no, es minuto a minuto”, sostuvo.

A cerca del estado de salud de los lesionados reveló que serían dados de alta en el transcurso del día, menos la persona que se pre infarto, que seguiría bajo observación médica.