Madrid/Düsseldorf. Cientos de españoles y alemanes protestaron este domingo, respectivamente, en Madrid y Düsseldorf, en contra de la gestión de sus gobiernos contra la pandemia del coronavirus

Ciudadanos repudiaron en la capital española la forma como la presidenta regional está respondiendo a la crisis del coronavirus, luego de imponer nuevas restricciones en los vecindarios con las tasas de contagio más elevadas.

Con mascarillas e intentando mantener la distancia social, los manifestantes aplaudían al unísono mientras pedían a gritos la dimisión de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso. Los manifestantes se reunieron a mediodía el domingo en diferentes puntos de la ciudad, lo que complicó calcular el tamaño de la protesta.

Las restricciones afectan a unas 860 mil personas que no podrán salir de sus barrios excepto para ir al trabajo, estudiar o una cita médica. Los parques en el área se cerrarán, y los restaurantes y tiendas limitarán su cupo a 50% de su capacidad.

España busca contener una segunda ola de Covid-19, que ha matado por lo menos a 30 mil 400 personas, según el Ministerio de Sanidad. La tasa de transmisión en Madrid es más del doble a la del promedio nacional, que ya es la mayor en las tasas de contagio en Europa.

Por su parte, cientos de personas se manifestaron en el centro de Düsseldorf contra las restricciones del coronavirus impuestas por el gobierno y a favor de otras causas.

Las personas ondeaban letreros con frases como “Fin al pánico, la pandemia corona es una mentira” y “rebeldes corona”, mientras se reproducían canciones criticando las restricciones debido al Covid-19.

Coreaban “liberen a Julian Assange” junto a una bocina y formaron una “W” — que simbolizaba “we all” (“todos nosotros”) — con sus manos, que levantaron sobre sus cabezas mientras se reproducía la banda sonora de Carrozas de Fuego.

No había mascarillas a la vista más allá de las usadas por los periodistas que cubrían la manifestación y algunos niños que estaban entre los participantes.

Antes de dispersarse para caminar a lo largo de una ruta en la ciudad occidental, el grupo se movía al ritmo de la canción What a Wonderful World de Louis Armstrong y un hombre disfrazado de Superman cantaba.

La policía no reportó incidentes.