Con una duración de más de una hora, y con alrededor un kilómetro de distancia recorrida, se llevó a cabo la Procesión de Silencio en el Municipio de Viesca, Coahuila.
Cientos de visitantes de diferentes partes del estado acudieron a la parroquia del pueblo de Viesca para celebrar, por sexta ocasión, la procesión que forma parte de las actividades que promueve el Gobierno del Estado.
De acuerdo con el Cura Gonzalo Alejandro Limón, párroco de la parroquia Santiago Apóstol, esta tradición comenzó a hacerse pública desde hace apenas seis años pero son décadas las que el propio pueblo realizaba esta actividad religiosa.
El sacerdote recordó que esto representa el duelo de María y el acompañamiento de los católicos en su dolor por la reciente crucifixión de Jesús de Nazaret.
“Esta es la sexta versión, el gobierno del Estado comenzó a mencionar a Viesca como pueblo mágico. Esta procesión años atrás ya existía. Se hizo pública cuando el gobierno del Estado destacó a Viesca como Pueblo Mágico”, señaló.
En esta ocasión el obispo emérito, José Guadalupe Galván Galindo, realizó el recorrido. La mayoría de los eventos en Semana Santa en todo el mundo fueron dedicados a los jóvenes por órdenes del líder de la iglesia católica en el Vaticano, el Papa Francisco.
