El Real Madrid iniciará mañana ante el América de México su último gran desafío del año, el Mundial de Clubes de fútbol, un torneo que afronta entre la serenidad y la desconfianza.

"Sabemos la importancia que tiene, es una competición que queremos disputar e intentar ganar. Llegamos cansados tras el viaje, pero ya estamos listos para el partido que tenemos mañana", opinó hoy el entrenador blanco, Zinedine Zidane, en una rueda de prensa en la ciudad japonesa de Yokohama.

El Real Madrid llega lanzado al partido después de enlazar 35 partidos seguidos sin perder, un récord histórico del club, y de situarse como claro dominador de la Liga española con seis puntos sobre el Barcelona.

Ahora el campeón de Europa quiere repetir lo logrado hace dos años, cuando ganó el Mundial de Clubes tras superar al Cruz Azul primero y a San Lorenzo en la final. Si consigue el domingo el título sería un broche de oro para un año que comenzó con la destitución del técnico español Rafael Benítez y la llegada de Zidane y continuó con la conquista de la Liga de Campeones en mayo tras superar al Atlético de Madrid en una dramática tanda de penales. Por eso están en Japón.

Zidane se llevó a todo su plantel a excepción de Gareth Bale, recién operado de una lesión de tobillo. Tampoco podrá contar para las semifinales con Sergio Ramos, quien sufre una pequeña sobrecarga, y mantiene la duda de otro central, el portugués Pepe, quien no se entrenó hoy por molestias musculares. Con Raphael Varane como seguro titular, Nacho Fernández es la alternativa para el eje de la zaga.

Lo más probable es que Zidane alinee su centro del campo favorito, que incluye a Carlos Casemiro, Toni Kroos y Luka Modric, y la gran incógnita es ver quién acompaña a Karim Benzema y Cristiano Ronaldo, el nuevo Balón de Oro. Podría ser un centrocampista, como Isco, un extremo, como Lucas Vázquez, o un punta lleno de movilidad, como Álvaro Morata.

"Vamos a tener que jugar el partido contra un equipo que cuidado. Vamos a jugar contra un equipo muy bueno que nos va a poner en problemas. A mi equipo le voy a decir que el partido no está ganado hasta el final", explicó Zidane.

El América se enfrenta al Real Madrid con la ilusión de llegar lo más alto posible y de dar la sorpresa. "Ellos (Los jugadores del América) ya conocen lo que es esta institución, la exigencia que tenemos y las metas altas que siempre existen, los veo muy motivados", dijo el presidente deportivo del conjunto azulcrema, Ricardo Peláez.

El América, que en 2006 perdió ante el Barcelona en su primera semifinal del certamen internacional, tiene fe. "Es un halago estar en América, es un equipo grande. Lo que nadie espera puede pasar", aseguró el entrenador de las "Águilas", el argentino Ricardo La Volpe.

El equipo azulcrema pasa ahora por una buena racha bajo el mando de La Volpe, pues desde su llegada al banquillo acumuló 12 encuentros sin derrota, incluido el triunfo ante el Jeonbuk Hyundai.

El volante estelar del conjunto amarillo, el argentino Rubens Sambueza, ya se entrenó al mismo ritmo con el equipo y podría entrar en el equipo de La Volpe ante el Real Madrid, un favorito al que el conjunto mexicano quiere discutir.

El conjunto mexicano disputará el pase a la final ante el Real Madrid después de superar en los cuartos de final al Jeonbuk Hyundai por 2-1 gracias a un doblete del argentino Silvio Romero el domingo en Suita.

"Tenemos que hacer el partido de nuestra vida para poner al América en lo más alto; somos un equipo sólido, trataremos de hacer nuestro juego sin importar el equipo rival, vamos a disfrutar el duelo ante el Madrid", expresó Romero.

América es el cuarto club mexicano que llega a esta instancia, en la que todos perdieron: Pachuca (2008), Atlante (2009) y Cruz Azul (2014). El América cayó el pasado año en cuartos de final por 2-1 ante Guangzhou Evergrande de China y quedó quinto al superar por el mismo marcador al conjunto africano Mazembe.