Reactivación de economía va al 90%

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Reactivación de economía va al 90%

Atentos. Para ayudar a la economía familiar, el Gobierno Municipal puso en marcha, con 150 mdp, Echados pa’ delante. Archivo
Para garantizar el cumplimiento de las medidas sanitarias se creó la figura de los Vigilantes de la Salud, quienes colaboraron con los inspectores de las diferentes dependencias municipales

Al cumplirse un año de que se presentó el Plan de Reactivación Económica para la región sureste de Coahuila, se ha mantenido un equilibrio entre el cuidado de la salud y las acciones necesarias para dinamizar la economía en los diferentes sectores.

Durante este periodo, que inició el 16 de mayo de 2020, ha sido clave la corresponsabilidad entre la sociedad, el gobierno y la iniciativa privada, quienes comparten el objetivo de fortalecer la economía durante esta contingencia.

Con el apoyo del gobernador Miguel Riquelme, la región sureste ha mantenido una serie de estrategias que han dado muy buen resultado.

“Esta lucha era de todos, como lo dijimos desde un principio, si cumplíamos y éramos corresponsables, avanzábamos y se logró.”

UN PROGRAMA EXITOSO

Una de esas medias fue el programa Echados Pa’ Delante, en el cual se destinaron 150 millones de pesos para impulsar la reactivación económica en diferentes frentes.

Créditos a Mipymes, a mujeres emprendedoras, complementos al salario, apoyos a hijos y nietos del personal de enfermería, empleo temporal, la tarjeta Echados Pa’ Delante, son algunas de las vertientes de la estrategia.

En la actualidad se ha reactivado más del 90 por ciento de la economía, en tanto que la ocupación hospitalaria se mantiene, de acuerdo al último reporte, por debajo del cinco por ciento, una de las más bajas en lo que va del año.

No obstante, para la reapertura de las diferentes actividades comerciales, las autoridades, en coordinación con especialistas médicos y representantes de los diferentes giros, elaboraron una serie de protocolos.

NECESARIO CUIDADO DE LA SALUD

La intención de esas medidas es disminuir el riesgo de contagios entre la población y así avanzar, precisamente, en la reactivación de la actividad comercial.

Estos protocolos que, entre otros aspectos incluyen porcentaje de ocupación de los establecimientos y sus horarios, han sido analizados, aprobados y ajustados dependiendo del semáforo epidemiológico.