LONDRES.- El canadiense Milos Raonic está seguro que tendrá dolores fuertes pero se sentirá orgulloso de haber peleado al máximo, incluso con catarro, contra el británico Andy Murray por un puesto en las semifinales del Masters.

“Tengo que estar orgulloso porque acabé el año dándolo todo, exprimiendo toda la energía que tengo. Pero estoy seguro que mañana (hoy) sentiré dolores fuertes”, dijo Raonic.

El canadiense, que llegó a estar a dos puntos de la victoria en el primer desempate, y que tuvo una bola de partido en el segundo, comentó que a veces él mismo se siente su “peor enemigo”.

“Lo intenté todo y de la mejor manera posible, dejándome todo en la pista. Hice todo lo que pude, todo lo que estaba de mi mano, al menos lo intenté. Fue así de simple” señaló el discípulo de Carlos Moyá.

“El objetivo es seguir estando sano. Esa ha sido mi kriptonita”, dijo Raonic, que aseguró que el partido disputado contra Murray en el O2 había sido el mejor de su carrera.